La salud mental como construcción social

LA SALUD MENTAL COMO CONSTRUCCION SOCIAL
Estrategias de trabajo en Salud Mental en situaciones de alta vulnerabilidad psicosocial

El presente es un trabajo en base a los desarrollos de la Psicología Social Pichoniana que hizo hace algunos años Ana P de Quiroga y que creo, desde este Blog de cátedra siguen absolutamente vigentes y nos convocan a tenerlos en cuenta como marco teórico-operativoen PSICOLOGIA COMUNITARIA o como a nosotros nos gusta mas denominar: “Psicología de la calle y en la calle”. Hugo García – Docente Coordinador de la modalidad de cátedra en la UADER.

I. Salud Mental como construcción social:

LA SALUD MENTAL ES UNA CONSTRUCCION SOCIAL, es decir colectiva, histórica y concreta. La Institución Salud está presente –de un modo u otro- en todas las instancias dela vida social. Está en obra, tanto en el sentido de desarrollo o de deterioro y daño en distintas prácticas: el trabajo, la vida familiar, la política, la justicia, las formas de la sexualidad, la escuela, la crianza de los hijos, el uso del tiempo libre…Por ello sostenemos que salud mental es un HACER Y DESHACER SOCIAL, que tiene por escenario la vida cotidiana, las condiciones concretas deexistencia. Esa construcción social, en términos de crecimiento, está indisolublemente ligada al desarrollo de un proyecto colectivo en el que pueda inscribirse para cada uno de nosotros un proyecto personal y nuestros anhelos como Sujetos de Necesidades.

II. Estrategias de trabajo en Salud Mental en situaciones de alta vulnerabilidad psicosocial.
Un modelo teórico-técnico de intervención:

APARTIR DE ENTENDER LA SALUD MENTAL COMO CONSTRUCCION SOCIAL, desarrollamos un modelo de trabajo sustentado en modalidades operativas implementadas y conceptualizadas por Enrique Pichon-Rivière. Uno de los rasgos centrales de ese modelo es instalarse en la situación de conflicto, ir hacia ella una vez detectada. Este modelo operativo fue instrumentado por EPR en la llamada urgencia psiquiátrica.
Lamodalidad consiste en instalarse en el habitat del sujeto en crisis, convivir –en equipo- con los protagonistas de esa crisis, que no es solo vivida por el que se muestra como portavoz, ya que todo su entorno inmediato y mediato participa de la situación. Esos otros participantes son los integrantes del grupo familiar, pero también amigos, vecinos… (esto implica plantearse la intervención “en” y“con” redes). Todos estos participantes del entorno vincular del Sujeto son potenciales operadores, en tanto pueden aportar a la comprensión y transformación de ese proceso, que emerge un día, pero que se gesta desde tiempo atrás y con muchos protagonistas, siempre en la inteligencia de que el proceso de salud y enfermedad es un movimiento dialéctico, contradictorio.
Esta manera de operar, estaforma de intervenir, llevó a que Pichon-Rivière no se restringiera ni en su tarea clínica ni de promoción de salud, al ámbito institucional o al consultorio, sino que jerarquizara como rasgo imprescindible de su práctica el análisis del acontecer social-vincular, el contexto psico-socio-cultural, las condiciones concretas de existencia del portavoz del conflicto y su entorno, la intervención endistintas dimensiones e interrelaciones. Y esto es lo que precisamente le permitía analizar el interjuego intrasubjetividad/intersubjetividad, la eficacia de las relaciones reales en el conflicto, el lugar de lo fantaseado como interpretación de la situación.
Esta modalidad de intervención psicológica supone “poner en práctica” la teoría de los ámbitos e ir gestando un esquema de interjuego delámbito psicosocial (individual, singular), sociodinámico (grupal), institucional y comunitario que co-existen y estan en interacción permanente. Hacerlos “jugar” como logística de intervención. También –y en esto nos va la internalización que hemos podido lograr en nosotros de una actitud y aptitud psicológica que siempre está en construcción- de poder detectar distintos niveles de determinación...