La Sana Injerencia Del Estado

LA SANA INJERENCIA DEL ESTADO EN LA SALUD MENTAL:
SU NECESIDAD Y URGENCIA
Por Guillermo C. Alonso Sainz – Abogado
Los cambios de la sociedad --en especial a partir de la globalización-- hanprofundizado la desigualdad entre los individuos debido a la creación de elementos tecnológicos que permiten un mayor intercambio de información, ya que, a la fecha, el acceso a dicha tecnología siguesiendo limitado a una mínima parte de la población mundial.
También la salud mental está ligada claramente al desarrollo humano. El desafío, tanto en nuestro país como en el mundo, es encontrar dos otres conceptos directrices que permitan un único camino en el tratamiento de la salud mental.
La Ley 448 de Salud Mental de la ciudad de Buenos Aires, constituyó un disparador de avanzada ya que, porejemplo, incorpora la intervención del servicio de orientación y de evaluación, así como establece ciertos criterios únicos de participación y tiempos de tratamiento. Quizás uno de los mayoresimpedimentos, seguramente como consecuencia de factores políticos, es que no cuenta con la debida participación ciudadana.
Y, con el dictado de la Ley de Salud Mental (26657), aparecen los cuerposinterdisciplinarios, hay mayores controles y se limita la temporalidad de la incapacidad desde el punto de vista técnico jurídico.
Quizás este proceso, iniciado a fines de diciembre de 2010, tenga por objetivobuscar mecanismos mínimos de ejecución y no caer en discusiones bizantinas que impidan la tarea de proteger al individuo en su faz mental. No se puede ni se debe renegar de las cuestiones positivasdel pasado; sin embargo, quizás sea mejor hablar de reestructuración en lugar de utilizar un término antipático como ‘desinstitucionalizar’.
Ahora bien, dentro del concepto de la prestación médica, lasalud mental constituye quizás la mayor erogación de lo que es la salud en su conjunto. De más está mencionar el fenómeno de los últimos tiempos: arduas batallas judiciales bajo la forma de amparos...