La Sangre

La Sangre





De tulio Manuel Sestero


Antonio porta carrero después de un largo sueño despierta restregándose los ojos con ambos puños bosteza, con asperidad con la boca abierta de par en par y mira en torno a él con asombro como si fuera la primera vez que está en torno a ese ambiente. Antonio es un joven de estatura eminente fuerte, la fisonomía enérgica y simpática lo hacen verelegante. Los cabellos negros de rebeldes mechones como si fuera de puro azabache, la nariz roma puntiaguda y los labios carnosos de bordes morados. El preso registra la estancia como si la viera por primara vez.


Entre las cosas que ve en la estancia se observa algunas obras, entre estas hay una escrita por él; la cual después de haber leído un par de veces como si fuera de un autordesconocido exclama con dolor “¡un año ya!” Y se pone de pie caminando en dirección al lavado. Con vigor se enjuaga el rostro y demás partes. Mira y chequea El ambiente con serenidad jubilosa afirma que el hombre fuera de esta naturaleza, no ha de sufrir, sin embargo, Antonio es un hombre inteligente a pesar de su condición contemplador importante.


La tiranía le oprime sus fuerzas vitales como sifuera un títere. Luego, Antonio se siente abatido por algunos pensamientos que lo llevan a sentir ira y se arroja al suelo con desdén, luego de estas reacciones se pregunta la hora por la que pasa el día en ese instante ya que había perdido hasta la noción del tiempo. En la soledad del enclaustramiento ¡como le agrada a la visión del riente valle nativo, y conque placer buscaría reposo y olvido de susmontes fragantes!.


Antonio recuerda un momento en el que tenía 5 años, cuando una vecina lo lleva tirado de la oreja, acusándole de haberle encontrado con su hijita escondidos entre la ropa sucia haciendo sabría dios que cosa. Hasta los 8 años su vida transcurrió entre juegos con la chiquillas, perturbado por las insinuaciones tempraneas de genio de la especie, y baños en el río en compañíade las vecinas cosa que lo hacía sentirse el rey de su mundo.


Cada día le aportaba en sus horas un momento de dicha. En los atardeceres de la hierba emergía deliciosas tibieza. Cumplidos los 8 años sufrió los primeros cambios desagradables de su vida. En su casa había aprendido a deletrear, la escuela fue siempre el castigo con que su madre le amenazó porque no le agradaba para nada el asunto, ya no le llevaron mas a bañarse con las mozas del vecindario y terminaron los retozos en la grama con las chiquillas.


Corría el año 1886 el cual no fue de gracia ya que presidía un general de treinta años, con fama de valor e inteligencia. Meses atrás la capital asustada vio cercada la casa del ex presidente Guillermo.


Dos candidatos presidenciales se disputaban el triunfo. Uno deellos era Ulises Heureaux, alias Lilîs, hombre de pocas palabras y de agrecibas decisiones que ya había ejercido el poder. La atmósfera se calentaba pronto, y los periódicos recogiendo las opiniones de ambos partidarios los cuales no querían aceptar la derrota. La tarde de un domingo, entre alboroto, bandereos, música y cohetes, desfila por las calles brillantes y numerosas manifestacionesmayorista.


Los comicios duraron tres días del mes del julio. En la capital los mayoristas protestaron. Apoyado por la autoridad un negro bellaco, con un gran perro al lado se apareció en el palacio del concejo, en donde se efectuaba la acción electoral creando disturbios por todos lados y en gran manera.


En todos los pueblos de la republica ocurrían algunas cosas parecidas, permaneciendo lasupremacía en el grupo que contara con la autoridad ya que los demás tenían la desventaja de ser los oponentes al regimen. En pequeños lugares iguales o parecidos se reunieron miles de electores. El 21 de julio en la vega parece que se había producido algunas disputas y se organiza con actividad una columna a las órdenes de Lilîs para combatir la revolución.


Se decía que el gobierno caería al...