LA SANTIDAD MATRIMONIAL
MENSAJE CRISTIANO I
Tema: La Familia y los Jóvenes.
Presbítero: Aldo Bernal.
Responsable: Cynthia de Martínez
Colegio: San Francisco de Asís.
Villa Elisa - Paraguay
Junio- 2013
INTRODUCCION
El tema a desarrollar es la “familia y los jóvenes”. Cada generación y sobre todo cada época tiene su modo de ver las cosas ydesarrolla su estilo de vida. Los padres con frecuencia no encuentran una respuesta adecuada para los jóvenes de hoy día, y se dan cuenta de que muchas cosas que hasta entonces les parecía que estaban bien, el mundo les ofrece otras cosas que están mal.
En la adolescencia los jóvenes comienzan a descubrir su propio yo, y a partir de ese momento se sienten capaces de construir y de dirigir ellosmismos su propia vida.
El trabajo con los jóvenes que se sienten cristianos y asumen su compromiso participando como catequistas, misioneros, en algún grupo juvenil o sencillamente yendo a la misa los domingos; escuchan muchas palabras de otros jóvenes también de sus referentes en el compromiso parroquial, de adultos y de uno mismo.
Pero en un año y aún en un tiempo largo, quizás no escuchan denadie algunos elementales puntos básicos y se rebelan contra todo.
La elección del tema a tratar en este trabajo surge de mi propia experiencia como madre, de mi trabajo con grupos de jóvenes dentro de mi comunidad y de un serio interés por brindar una solución a las complicadas situaciones a las que se enfrentan los jóvenes de hoy día.
CONTENIDO
La familia cristiana tiene su origen en elmatrimonio que es imagen y participación de la Alianza de Amor de Cristo y la Iglesia. La familia es lo más real e importante que tenemos, ya que es nuestra iglesia doméstica donde se cultivan los verdaderos valores y se aprende a amar.
En el seno de la familia los padres han de ser para sus hijos los primeros anunciadores de la fe y del amor con su palabra y su ejemplo.
En este sentido, la tareafundamental del matrimonio y de la familia, es estar al servicio de la vida. La educación en la fe por los padres debe comenzar desde la más tierna infancia, mediante “el testimonio” de una vida cristiana de acuerdo al Evangelio.
En los últimos tiempos, el Dios de la vida nos ha venido haciendo reiterados llamados a la santidad. Dios quiere que la santidad florezca en la iglesia, pero el llamadoa la santidad no puede restringirse a la santidad sacerdotal o la vida religiosa. También la santidad laical tiene que florecer en nuestra iglesia y familia.
Si no lo vivimos así, el Evangelio en nuestra vida “no funciona”. Es decir, no es posible encarar la vida cristiana con un corazón dividido y menos todavía reduciendo su influencia a un sector de la vida (el aspecto religioso) o una etapa(2 o 3 años de entusiasmo y luego soy uno más).
El Evangelio devuelve el ciento por uno, como lo vemos expresado en las hermosas recompensas que el Señor promete a los apóstoles en Mateo 19, 27-30 cuando el compromiso es de la persona entera y de la vida entera.
Estamos viviendo en una época muy conflictiva, y en especial para los jóvenes donde nuestra fe se halla bombardeada y atacada en todoslos aspectos. Los medios de comunicación de masa como: la televisión, el celular, el internet; han transformado incluso la manera de pensar, y de actuar de los jóvenes.
Ya que cada vez son más los que viven a expensas de sus padres sin buscar independizarse del todo y sin reconocer el valor de ganarse las cosas a través del esfuerzo.
Esta problemática nos da como resultado una generación deadultos inútiles y débiles. Son chicos super débiles: se traumatizan con todo, se deprimen con todo, se quieren suicidar por todo, porque no saben luchar.
Nosotros los padres les quitamos la capacidad de postergar la gratificación, trabajando duro y de luchar por lo que quieren por darles demasiado.
En la actualidad vemos una cantidad de jóvenes malagradecidos, sin entusiasmo, vagos, de todas...
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