La tarantula de patas cortas
Desde allí, comienza a surgir unaíntima relación entre ambos, pues, todos los días Hachiko acompañaba a Ueno hasta la estación de trenes, y, después de comprar el billete, se despedía de su mascota para marcharse a la Universidad. Hachikoesperaba todo el día en el parque de la estación hasta que el profesor regresara, ya por la tarde. La rutina llamó la atención de los vecinos que frecuentaban el barrio, que al poco tiempo tambiénsintieron un gran cariño y aprecio por el perro.
La costumbre duró hasta el año 1925, cuando, el día 21 de mayo, después que Hidesamuro se despidiera de Hachiko, sufriría un fatal ataque cardíaco enla universidad donde impartía sus clases. Hachiko, sin entender lo sucedido, esperó la llegada de su amo por la tarde y, al ver que no llegaba, decidió quedarse allí. Su fidelidad por su amo lomantuvo, sin importar las condiciones climáticas, estacionales ni la persuasión de la gente, merodeando el parque y la entrada de la estación de Shibuya.
Los vecinos, que ya estaban al tanto de todo,conmovidos por tal actitud, deciden contratar a un escultor para que levantara una estatua en su honor. Y así, en el año 1934, se erige una estatua en su conmemoración, que, incluso, el mismo Hachiko...
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