La tarea colectiva de educar en momentos de crisis
Páginas: 12 (2852 palabras)
Publicado: 30 de septiembre de 2010
Año XIV Nº 37 Junio 2003
La tarea colectiva de educar en momentos de crisis
El reto de enseñar y aprender en condiciones adversas o, según la expresión lingüística difundida entre los argentinos, "en la crisis", constituye un eje vertebrador reiterado en las preocupaciones y propuestas de quienes desarrollan algún quehacer en el campo educativo y social. Los materiales incorporados en elpresente número de la Revista, conjuntamente con los dos que le predecedieron, dan cuenta precisamente de la caladura de este desafío, así como de la amplitud y diversidad de estrategias que se motorizan desde diferentes ámbitos para que todos nuestros alumnos puedan acceder a una educación de calidad con independencia del origen social del cual provienen. Poner en entredicho las visionesreduccionistas que atribuyen únicamente resultados negativos y desestructurantes a los contextos y procesos de crisis social en general, y a los ámbitos de pobreza y deprivación, de modo particular, es el hilo conductor de los artículos de las secciones de Opinión y Experiencias. Es posible acercarse, entonces, a los indicios de una intensa actividad que se despliega en las más diversas instancias queconstituyen el tejido social y el aparato estatal, en pos de reconstruir consensos, sentidos, expectativas y acciones que den contenido al espacio público y común, y a la educación como una de sus garantías fundamentales. En este camino, los artículos se ubican decididamente en el clima de la primera década del siglo XXI. Ellos han dejado atrás la obsesión por la transformación de la arquitectura de lasociedad por venir, que predominaba en las dos décadas precedentes, así como la atmósfera de insatisfacción y temores que acompañó el cierre del milenio. Toman entre sus manos los contradictorios
Revista Latinoamericana de Innovaciones Educativas
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La tarea colectiva de educar en momentos de crisis
matices y potencialidades, los avances y retrocesos, las apuestas y desventuras, através de los cuales se re-construye la sociedad y la educación como resultado de sujetos que se empecinan en proyectos colectivos, sean éstos políticas educativas o propuestas para una escuela o un colectivo de alumnos. De modo estimulante, los artículos permiten constatar que los esfuerzos por educar en tiempos de crisis no han conducido a propugnar una "pedagogía de la crisis", especie de remiendo delo que sería una buena educación que se justifica por las restricciones de la coyuntura, o que se encuentra estrictamente circunscripta a las víctimas de tal crisis. Por el contrario, muestran que las acciones se orientan a reformular y volver a sostener el papel central de la educación, valorizando el efecto de las prácticas pedagógicas e institucionales, aún en los contextos más difíciles. Enla sección Opinión, el artículo de Ana Donini y Carolina Schillagi "Educar en tiempos de crisis" ofrece un marco abarcador para comprender los procesos a los que hemos estado haciendo alusión, al analizar en primer término las transformaciones de la matriz de relaciones socio-políticas y organizativas entre el Estado y la sociedad, conjuntamente con las nuevas formas en las que se expresa la accióncolectiva y la movilización de la sociedad civil en Argentina, y seguidamente, al profundizar en las relaciones, tensiones y procesos micro y macro sociales que sucedieron a las políticas y programas de transformación educativa, los que deben ser estudiados aceptando la complejidad y opacidad con la que se presentan. En tal sentido, el carácter controvertido y disputado que tiene la matriz derelaciones que organiza densamente el intercambio entre el Estado y la sociedad civil, post reformas estructurales, es uno de los datos más significativos de la crisis argentina. Pero las autoras destacan que en este cuadro complejo y por momentos frag-
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mentado,conviven tanto la pauperización y la multiplicación de identidades sociales aún de bordes difusos,...
La tarea colectiva de educar en momentos de crisis
El reto de enseñar y aprender en condiciones adversas o, según la expresión lingüística difundida entre los argentinos, "en la crisis", constituye un eje vertebrador reiterado en las preocupaciones y propuestas de quienes desarrollan algún quehacer en el campo educativo y social. Los materiales incorporados en elpresente número de la Revista, conjuntamente con los dos que le predecedieron, dan cuenta precisamente de la caladura de este desafío, así como de la amplitud y diversidad de estrategias que se motorizan desde diferentes ámbitos para que todos nuestros alumnos puedan acceder a una educación de calidad con independencia del origen social del cual provienen. Poner en entredicho las visionesreduccionistas que atribuyen únicamente resultados negativos y desestructurantes a los contextos y procesos de crisis social en general, y a los ámbitos de pobreza y deprivación, de modo particular, es el hilo conductor de los artículos de las secciones de Opinión y Experiencias. Es posible acercarse, entonces, a los indicios de una intensa actividad que se despliega en las más diversas instancias queconstituyen el tejido social y el aparato estatal, en pos de reconstruir consensos, sentidos, expectativas y acciones que den contenido al espacio público y común, y a la educación como una de sus garantías fundamentales. En este camino, los artículos se ubican decididamente en el clima de la primera década del siglo XXI. Ellos han dejado atrás la obsesión por la transformación de la arquitectura de lasociedad por venir, que predominaba en las dos décadas precedentes, así como la atmósfera de insatisfacción y temores que acompañó el cierre del milenio. Toman entre sus manos los contradictorios
Revista Latinoamericana de Innovaciones Educativas
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La tarea colectiva de educar en momentos de crisis
matices y potencialidades, los avances y retrocesos, las apuestas y desventuras, através de los cuales se re-construye la sociedad y la educación como resultado de sujetos que se empecinan en proyectos colectivos, sean éstos políticas educativas o propuestas para una escuela o un colectivo de alumnos. De modo estimulante, los artículos permiten constatar que los esfuerzos por educar en tiempos de crisis no han conducido a propugnar una "pedagogía de la crisis", especie de remiendo delo que sería una buena educación que se justifica por las restricciones de la coyuntura, o que se encuentra estrictamente circunscripta a las víctimas de tal crisis. Por el contrario, muestran que las acciones se orientan a reformular y volver a sostener el papel central de la educación, valorizando el efecto de las prácticas pedagógicas e institucionales, aún en los contextos más difíciles. Enla sección Opinión, el artículo de Ana Donini y Carolina Schillagi "Educar en tiempos de crisis" ofrece un marco abarcador para comprender los procesos a los que hemos estado haciendo alusión, al analizar en primer término las transformaciones de la matriz de relaciones socio-políticas y organizativas entre el Estado y la sociedad, conjuntamente con las nuevas formas en las que se expresa la accióncolectiva y la movilización de la sociedad civil en Argentina, y seguidamente, al profundizar en las relaciones, tensiones y procesos micro y macro sociales que sucedieron a las políticas y programas de transformación educativa, los que deben ser estudiados aceptando la complejidad y opacidad con la que se presentan. En tal sentido, el carácter controvertido y disputado que tiene la matriz derelaciones que organiza densamente el intercambio entre el Estado y la sociedad civil, post reformas estructurales, es uno de los datos más significativos de la crisis argentina. Pero las autoras destacan que en este cuadro complejo y por momentos frag-
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mentado,conviven tanto la pauperización y la multiplicación de identidades sociales aún de bordes difusos,...
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