La trinidad de karl ranher
«En Alemania -dice el doctor Rahner- el diálogo entrecristianos y marxistas es casi inexistente. Esto ocurre porque el Partido Socialdemócrata no es un partido oficialmente marxista y porque los obispos preservan su carácter de cristianos de un modo bastante reaccionario. Nosotros, en la Sociedad Paulina, a la que pertenezco, intentamos un diálogo internacional, en el que participarían checos, italianos y personas de otras nacionalidades. Lasintenciones del diálogo, el acercamiento entre cristianos y marxistas parecieron propias del diablo. Por eso, la confluencia de opiniones que serían precisas para un entendimiento cristiano-marxista resulta imposible de momento en mi país.»
«Los sectores marxistas oficiales tampoco intentan seriamente este acercamiento. Mientras el clero teme una invasión marxista al estilo de la que hubo enChecoslovaquia, los marxistas consideran que el diálogo con los cristianos puede atacar sus esencias políticas.»
"La Iglesia: una evolución obvia"
Karl Rahner dice que ahora es simplemente un teólogo jubilado, que en efecto trabajó activamente para que el Concilio Vaticano II fuera lo que fue, pero que ahora no tiene influencia alguna sobre los obispos. En cuanto al Concilio, «no se puede saber si la Iglesiacatólica hubiera seguido la misma evolución si no se hubiera producido en los términos que conocemos. Lo que fue el Concilio fue una oportunidad para reflexionar sobre la dirección que debía seguir una entidad que por propia naturaleza siempre tiene que progresar y avanzar. Lo que era obvio es que la Iglesia ya no podía ser aquella comunidad estable y burguesa que se guiaba por los presupuestosimperantes cuando se inició este siglo.»«La Iglesia tiene que cambiar, evitando las situaciones ambivalentes y peligrosas. La sustancia de la fe no puede ser deshecha por la evolución política de la sociedad. El futuro absoluto, que es Dios, no puede ser suplido por el marxismo mundano. Pero, por otra parte, la influencia de las doctrinas de la democracia política deben entrar en la Iglesia, quedebe hacerse más democrática.»
En el Concilio Vaticano II se sentaron las bases para acabar con un centralismo perjudicial. El doctor Rahner cita la eliminación de una lengua litúrgica única y su sustitución por las lenguas de los diferentes países como uno de los elementos más positivos de la mecánica que el citado Concilio introdujo en la Iglesia católica.
Karl Rahner no es un filósofo, segúnrepite este lúcido jesuita. «Soy un pequeño dogmático que ha enseñado teología. Existen muchas corrientes filosóficas, pero no se pueden sintetizar en la práctica. No hay una escolástica válida para todos, pero en el futuro habrá más filosofías que si quieren ser verdaderas no se pueden separar. Cada una de estas filosofías serán especies distintas de la fe cristiana. Unas se podrán conciliar y otrasresultarán incompatibles. Las distinciones no se podrán hacer deprisa. En mi caso particular, yo no he podido hacer distinciones tajantes entre las filosofías porque creo que no todo lo que dicen los hombres puede ser estrictamente verdadero. Nada de lo que se dice es indiscutible, ni una formulación filosófica puede existir sin las otras.»
«Estoy convencido -dice Karl Rahner- de que sin un...
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