La Trompeta
Érase una vez una trompeta vivía en una villa pequeña. La trompeta era mágica, cuyas notas resonaban por todas partes, traían felicidad y alegríapara todos. Su tono era lleno y resonante que agradaba a los oídos. Cada día la trompeta tocaba desde el amanecer hasta el anochecer.
Pero un día, la trompetadesapareció y nadie sabía qué hacer. Todo el mundo estaba triste. Nadie hizo nada, salvo su dueño. Él fue el único suficientemente decidido para ir a buscar la trompeta.Él miró por todas partes, alto y bajo, lejos y ancho. Al poco tiempo, Él encontró una chica que tocaba el clarinete. Ella dijo, “Aquí, toma mi clarinete y teayudará a encontrar tu trompeta”.
El dueño de la trompeta le dio las gracias. Así, el dueño de la trompeta dejó de buscar por la trompeta y él empezó a tocar elclarinete dondequiera que iba con la esperanza de encontrar su trompeta.
Finalmente, el dueño encontró una vieja iglesia abandonada en la sombra de una montaña. Todoslos otros músicos de la villa pequeña estaban allí. Querían que la trompeta volviera a tocar día y noche, y así la felicidad regresaría a la villa pequeña.
Eldueño de la trompeta se dio cuenta que nadie, salvo la trompeta, querría salir de la iglesia con aquel ambiente triste. Así, comenzó a tocar música lo más alegre quepodía.
Entonces la trompeta salió de la iglesia más animada que nunca, restableciendo la alegre de la villa pequeña. Allí, el dueño entendió el valor de daralegría a aquellos que está tristes.
Y ahora en la villa pequeña, todo que ve alguien triste, les ayuda con una poca música para poner una sonrisa en su cara.
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