La Valija Viaja En Bicicleta 1
Otros escenarios de aprendizaje
Era un día viernes del mes de abril, 7,30 hs., con el sol golpeando fuerte y el viento Norte que despeinaba mi hermoso y supe planchado carré. Estaba impecable -bueno, es un decir, lo mejor que podía estar- ya que mi querido uniforme de maestra jardinera de tantos años atrás, estaba en plena batalla con mi prominente estómagoactual, al punto que había llegado a reforzar cada uno de los botones ante cualquier eventualidad.
Tenía todo preparado: los cuentos super leídos, elementos caracterizadores, títeres y muchos muchísimos libros, de diversas temáticas, formatos (había conseguido unos tan pequeños que tenía que tomarlos con los dedos en pinza), tiempos: muchos actuales y otros más viejitos (tesoros que José, mi papá, mehabía regalado cuando era una niña diminuta a la que llamaban “pulguita”) y todo dentro de la VALIJA, objeto de culto prestado por Ady, querida compañera con la que compartimos sueños y realidades.
El proyecto surgió a partir del interés y la necesidad demostrada para con la escucha de textos literarios por los pequeños que asisten al jardín de INFANTES N° 8, lugar donde presto servicios. Todocomenzó como un juego, las “chicas”, mis colegas del jardín, una mañana me pregunta Claudia, ¿por qué no les contás un cuento a los chicos de la sala de cinco, de esos que vos relatas tan lindo?, bueno le dije a mi juego me llamaron.
Y bueno así un día incorporé títeres, otro día les traje un libro troquelado que había guardado muy celosamente a los pequeños, los viernes ya se habíainstitucionalizado que la Seño Claudia, nos traía de regalo una historia diferente. Los chicos felices y mis colegas ni les cuento.
Tanto fue el entusiasmo y la buena recepción de la propuesta que colegas de otros jardines se habían enterado y me preguntaron si no tenía ganas de ir a su jardín un día cualquiera a narrarles alguna historia a los pequeños. ¿Cómo negarme a esta propuesta? no imposible.
Y asícharlando con uno y con otros se fue gestando esta idea que al comienzo parecía muy loca pero a la vez divertida.
Me acerqué a las autoridades del Nivel y les comenté mi inquietud ante la demanda de mis colegas, después de muchas idas y venidas, conformamos una red interorganismos entre la Dirección de Educación Inicial, quienes aportaban el recurso humano (docentes con cambio de tarea que les gustenarrar) y la Subsecretaria de Cultura, quienes aportaban los recursos financieros y logísticos.
Así de esta manera, nacía el proyecto -, “LA VALIJA VIAJERA”, que, llegaría a todas las INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN INICIAL de la ciudad capital. Al terminar el proyecto visitamos catorce escuelas de jardín de infantes y ocho jardines de infantes nucleados, con 232 secciones de cuatro y cinco años, condiez docentes que recorrían las salas de jardín – sin percibir ninguna retribución económica- en grupo de dos docentes con sus valijas y recursos didácticos. Si bien, esta experiencia didáctica fue diseñada en algún momento quizás de locura o no tanto, sin lugar a dudas, fue enriquecida a partir del aporte de todos los actores involucrados, esencialmente de las colegas jardineras, con quienesinteractuamos conociendo a los grupos de niños o niñas y la participación comprometida de ellas en las Planillas de informe y sugerencias que completaban cada vez que asistíamos a un jardín.
La VALIJA merece ser escrita así, con mayúsculas, por su tamaño -1,40 m-, por su capellada: cuero lustrado y recién pintado, por sus años -más de 40, era del abuelo de Ady- y, especialmente por su cerradura: era unverdadero arte el poder abrirla, muchos lo habían intentado en vano.
Aquel día saqué la reluciente valija y dejándola a un costado le dije: -¡Quedate aquí y no te muevas! Mientras retiré mi motocicleta roja y, luego de subir tomé la VALIJA para colocarla en el manubrio cuando escuché un ruido extraño, más bien como una queja, a la que no dí mayor importancia; y de nuevo le hablé, mejor dicho le...
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