La Venganza del Gato Boris
Boris o la gesta de la amistad
Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor.
Cayo Cornelio Tácito (55-119 de nuestra Era)
La actriz Daniela Fuentes Marín en el papel de Boris.
¡Atención! Una amistad ha sido olvidada. Que las estrellas detengan su curso y escudriñen cuantoocurre entre los resquicios de la noche. Las sombras se han apoderado del arrabal donde vive el benévolo gato Boris (Daniela Fuentes, excelente) porque su mejor amigo, Federico Fetuccini (José Juan Villanueva, también perfecto) ha renegado de sus orígenes y de sus lealtades, cegado por la ambición.
Convertido en una celebridad, Fetuccini ha escalado la fama como cantante de ópera debido a uninsólito privilegio: es “la única voz en el mundo que es bajo, barítono y tenor al mismo tiempo”. Lo que nadie sabe, ni siquiera su criado, Igor (Jaime Noguerón delicioso en plan fársico), es que ese don es una virtud prestada, algo que no le pertenece. Fue una noche, hace muchos años, cuando, en nombre de su amistad, Boris convocó al Espíritu de la Luna y obtuvo el Elíxir del Canto para dárselo aFetuccini, quien desde entonces abandonó el callejón y se fue a conquistar el mundo, olvidándolo todo y a todos, incluido su mejor amigo.
Así comienza la historia de Fetuccini y de Boris: hablando de un olvido. Pero tal ingratitud no hará sino empeorar conforme se desarrolla la anécdota.
¡Atención! Una amistad está a punto de ser traicionada. Que la luna tutelar de los felinos disuelva su sonrisa deguadaña y tome nota de las decisiones que hilvanan suertes y destinos en el mundo de los gatos. Han pasado siete años desde que Fetuccini se fue. Siete, en los que el solitario Boris deambula por un mundo que ha perdido su sentido, mientras sobrelleva los acosos gandallas de la pandilla que liderea el minusválido gato Zaripón (José Suanate).
Cumplidos esos siete años, Fetuccini va a su ciudadnatal para dar un concierto y Boris lo busca, loco de contento, porque piensa que el tiempo no importa y que los corazones son siempre los mismos. Sin embargo, Fetuccini sí que ha cambiado. Y mucho. Detesta a otros gatos, sólo vive para disfrutar del éxito y lo que más teme es perder la fama. Precisamente por ese miedo, cuando ve a Boris, Fetuccini decide matarlo para que nadie revele la fuente de suprodigiosa voz o recuerde sus humildes orígenes.
Así es: el egoísmo convertirá a Fetuccini en asesino. A pesar de todo, una vez consumado el crimen, Boris echará mano de la última vida que le queda y emprenderá el asunto que da título a la bella tragicomedia La verdadera venganza del gato Boris (Maribel Carrasco, 1996), que fue estrenada en Morelia en 2009 por egresados de la Escuela Popular deBellas Artes congregados en el grupo Sonaja Roja, que dirige José Suárez Nateras (Suanate).
La puesta en escena se presentó ante la dirección artística de la XXXI Muestra Nacional de Teatro en la penúltima audición celebrada en Morelia, con miras a participar en el encuentro escénico. Los resultados se darán a conocer el próximo jueves 9 de septiembre.
Con una gran inventiva que incluye elacudir a títeres, al juego con mucho humor de comedia física, a rupturas dramáticas y a recursos multimedia, el grupo Sonaja Roja le da vida a un libreto que, de entrada, comprende y pone al día con extraordinaria eficacia los mecanismos del relato fantástico. El mundo de las pasiones humanas ha sido trasladado a un crepuscular universo gatuno en La verdadera venganza del gato Boris, donde el felinoprotagonista emprende una gesta a la vez inquietante y divertida para recobrar la amistad perdida y, de hecho, salvar a Fetuccini de sí mismo.
Así, por ejemplo, la crónica de cómo Boris obtuvo el Elíxir del Canto es narrada con una proyección de video en blanco y negro que se apropia de las estructuras de representación del cine silente de hace cien años (lo cual le añade al episodio, además,...
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