la verdad


Rosalía estaba tumbada en la alfombra de su habitación; era el primer día de verano y ella, en vez de sentirse alegre, se sentía triste, ¿porque? , no lo sabía, no tenía razón para estarlo; sehabía esforzado mucho, y sus notas así lo habían reflejado.
Bueno, a lo mejor si sabía porque era, o al menos lo sospechaba; este iba a ser el último que pasaría con Alicia; su amiga se iría a vivir aBarcelona al final del verano, no la volvería a ver en mucho tiempo, tal vez en dos o tres ocasiones a lo largo del año, pero para ella no era suficiente; nada volvería a ser igual, sobre todo despuésde la operación de su madre.
A Julia, la madre de Rosalía, le habían detectado un cáncer de piel hace aproximadamente un año; esta tan mala noticia, le había bajado la moral a toda la familia, enespecial a su hija; Rosalía sentía miedo, miedo por perder a su madre, que tanto le había ayudado, pero, en parte se sentía culpable; durante estos últimos meses había discutido mucho con su madre, enespecial esos días en los que brilla el sol.
A Rosalía, le gustaba ir a la playa con sus amigas, pero obviamente no podía ir sola, y en muchas ocasiones le acompañaba su madre, el problema no estabaen eso, si no en que su madre no podía estar más de 30 minutos al sol debido a su enfermedad, y justo a partir de los 30 minutos era cuando comenzaban las discusiones. Rosalía se quería quedar mástiempo. Al principio las peleas eran muy a menudo, pero poco a poco, Rosalía se dio cuenta de que el sol podía perjudicar seriamente a la piel de su madre. Eran como uña y carne, se contaban todo,pero… ¡que se le iba a hacer!, la pobre Rosalía era una adolescente.
Cada vez quedaba menos para la operación de su madre, tan solo catorce días; podían ser los últimos catorce días que tendría junto asu madre, por eso decidió pasarlos lo mejor posible.
Julia se acercó a la puerta de la habitación de su hija, la vió tumbada en la alfombra, con cara de amargura, al instante ya supuso porqué...