la vida en letra

Esta es la historia de dos enamorados. Una historia de amor como otra cualquiera, como miles y miles se suceden en lo ancho del globo y entre miles y miles de enamorados. En realidad no tiene muchode especial, al menos si la comparamos con la tuya, o con la de otro, o con la de cualquier pareja. Aun así, esta historia de amor es la historia de la paciencia y de la perseverancia, y quizá por esosea reseñable; aunque repito, realmente no tiene nada de especial.
Esta historia de amor comienza la noche veraniega de San Juan, cuando dos jóvenes de 18 años, recién abiertos al mundo, inocentesen realidad, se descubren mutuamente. Está comenzando el verano, el calor aprieta, el amor borbotea prácticamente por un aire que huele a playa, a fuego, a mar. Es la noche de San Juan en una playacomo otra cualquiera, y allí la conoció. Era muy guapa, rubia, ojos verdes, y aunque su aspecto no era todo lo espectacular que podía ser, el muchacho ya vio en ella algo especial, un flechazo sintióquizás, aunque él no creía en flechazos. Él era, para ella, un chico alto y guapo, algo fanfarrón y chulesco, realmente, aunque probablemente eso fue lo que le atrajo a los brazos de un muchacho que noera otra cosa que un poeta escondido dentro de un caparazón de tipo duro.
En aquella noche se conocieron y poco después comenzó su relación. Era verano, ¿qué amor no es feliz durante los meses deestivo?, podéis preguntaros. Disfrutaron como nunca lo habían hecho. Descubrieron qué significaba realmente amar a otra persona; descubrieron qué eradisfrutar de la compañía de una pareja, del cariño, dela pasión, del sexo.
Todo hasta ahora es como cualquier amor de verano; pero este amor de verano escondía una trágica verdad: a finales de septiembre, con el final de la estación, los jóvenesenamoradostendrían que separarse por motivos de estudio. Y es que ambos iban a comenzar la Universidad aquel año, pero en ciudades muy distantes. Exáctamente, a más de 600 kilómetros de distancia o a más...