la vida es bella
Fue profesor de historia y filosofía del Liceo Umberto I de Nápoles hasta elaño 1927, y luego en el Istituto di Magistero Suor Orsola Benincasa hasta 1936. En ese periodo colaboró también con la revista Logos.
Enseñó en la Universidad de Turín como profesor de historia de lafilosofía (1936 - 1976). En 1964 inició su colaboración con La Stampa.
En 1972 se trasladó a Milán donde, dejado el periódico turinés, colaboró con Il Giornale de Indro Montanelli, asumiendo durantecerca de un año el cargo de asesor de la cultura del ayuntamiento de Milán.
Falleció en Milán, por causas naturales.
De joven, y gracias a la reflexión de Aliotta, recibió la influenciadel contingentismo francés y del intuicionismo de Bergson.
Definía su filosofía como un existencialismo positivo; la positividad que Abbagnano reivindica para su propio pensamiento se opone alexistencialismo negativo de Jaspers y al ontologismo de Heidegger, aunque se esfuerza en conservar los aspectos de éstos que le parece que pueden incluirse en una visión crítico-constructiva de laexistencia.2 En 1943 obtuvo un papel de primer plano en el debate sobre el existencialismo que se publicó en la revista Primato.
Movido por esta exigencia también prestó especial atención a las corrientesneoempiristas y pragmatistas del pensamiento anglosajón, sobre todo al empirismo radical de Dewey.3
Siendo uno de los fundadores del Centro de Estudios Metodológicos de Turín, en 1950 dio vida a larevista Quaderni di Sociologia, y desde 1952 fue codirector, al lado de Norberto Bobbio, de la Rivista di filosofia.
Escribió una extensa Historia de la filosofía (Storia della Filosofia, 3 vols., 1949-1953) yun léxico filosófico. Reflexionó largamente sobre la noción de posibilidad, deteniéndose especialmente en la filosofía de Kierkegaard.4
Contra el nihilismo de otros autores, Abbagnano propone...
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