la visita
Páginas: 3 (697 palabras)
Publicado: 11 de mayo de 2014
LA VISITA
Recorría por las calles vacías y desoladas de Carhuapata a pasos lentos. Me encontraba algo cansado. Había caminado durante más de cinco horas sin tregua con la esperanza de encontrarloen el pueblo. Sin embargo al parecer todos habían salido a labrar sus tierras y de seguro no lo hallaría. Primera vez pisaba estas tierras.
Seguí caminando. Doblé la esquina. Mientras caminaba oíalos silbidos melodiosos de los jilgueros. Revoloteaban en el aire. Eran de color negro y de pechos amarillos.
Llegué a la plaza. Eso parecía. La observé detenidamente. Me llamó rápidamente laatención la fuente justo en el centro de la plaza. Me acerqué. De esta brotaba agua cristalina. Sus aguas se perdían por debajo de un muro de gran altura a través de un canal. A sus alrededores crecíanvegetaciones abundantes y toda clase de flores multicolores. Había jazmines, azucenas, lirios, rosas, dalias, claveles y pensamientos. Despedían aromas fraganciosas. Las mariposas revoloteaban sobre estas.Pequeña primavera detenida en el tiempo sin duda. El cielo azul despejado. El viento fresco y tenue.
Decidí descansar. Dejé a un lado mi quepi. Tenía mucha sed. Me arrodillé para tomar agua de lafuente. Saciado mi sed me senté en una piedra de forma ovoidal. Miré mi reloj. Marcaba las doce en punto del día. Me puse a observar detenidamente el pueblo.
Las casas estaban construidas dematerial rústico techadas con tejas a dos aguas. Todas con dos ventanas. Algunas estaban frente a frente como mirándose entre ellas. Algunas eran de dos pisos. Sobresalía de estas inmensos eucaliptos,huaranhuays. También nogales. La plaza formaba un cuadrado perfecto. A mi frente se encontraba el templo de la salvación flanqueado de casitas. Al otro lado una casona con muchas columnas. ¿Sería elmunicipio? No lo sé. A sus alrededores más casas. De una de estas sobresalía un letrero que rezaba: Tambo “Don Janto”.
Detrás del pueblo se erigía el imponente cerro Jatun Secclla coronando su cima una...
Recorría por las calles vacías y desoladas de Carhuapata a pasos lentos. Me encontraba algo cansado. Había caminado durante más de cinco horas sin tregua con la esperanza de encontrarloen el pueblo. Sin embargo al parecer todos habían salido a labrar sus tierras y de seguro no lo hallaría. Primera vez pisaba estas tierras.
Seguí caminando. Doblé la esquina. Mientras caminaba oíalos silbidos melodiosos de los jilgueros. Revoloteaban en el aire. Eran de color negro y de pechos amarillos.
Llegué a la plaza. Eso parecía. La observé detenidamente. Me llamó rápidamente laatención la fuente justo en el centro de la plaza. Me acerqué. De esta brotaba agua cristalina. Sus aguas se perdían por debajo de un muro de gran altura a través de un canal. A sus alrededores crecíanvegetaciones abundantes y toda clase de flores multicolores. Había jazmines, azucenas, lirios, rosas, dalias, claveles y pensamientos. Despedían aromas fraganciosas. Las mariposas revoloteaban sobre estas.Pequeña primavera detenida en el tiempo sin duda. El cielo azul despejado. El viento fresco y tenue.
Decidí descansar. Dejé a un lado mi quepi. Tenía mucha sed. Me arrodillé para tomar agua de lafuente. Saciado mi sed me senté en una piedra de forma ovoidal. Miré mi reloj. Marcaba las doce en punto del día. Me puse a observar detenidamente el pueblo.
Las casas estaban construidas dematerial rústico techadas con tejas a dos aguas. Todas con dos ventanas. Algunas estaban frente a frente como mirándose entre ellas. Algunas eran de dos pisos. Sobresalía de estas inmensos eucaliptos,huaranhuays. También nogales. La plaza formaba un cuadrado perfecto. A mi frente se encontraba el templo de la salvación flanqueado de casitas. Al otro lado una casona con muchas columnas. ¿Sería elmunicipio? No lo sé. A sus alrededores más casas. De una de estas sobresalía un letrero que rezaba: Tambo “Don Janto”.
Detrás del pueblo se erigía el imponente cerro Jatun Secclla coronando su cima una...
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