la voluntad de Dios

El Abandono de la Propia Voluntad como Camino de Comunión con Dios1
Por: Omar Rodríguez Oliveros
Como bien sabemos, el abandono es el acto más perfecto de amor a Dios que el ser humano pueda producir... El que da a Dios su voluntad se da así mismo y da todo... Esta es la manera más noble, más perfecta y más pura de amar... Más si el abandono perfecciona las virtudes, perfecciona también launión del alma con Dios...” 2 Por tanto, la naturaleza del abandono “Consiste en una amorosa, entera, entrañable sumisión y, concordia de nuestra voluntad con la de Dios, en todo cuanto disponga o permita de nosotros. Cuando esta voluntad es perfecta se le conoce como abandono.” 3 Es así que, el abandono en las manos del Señor requiere de sufrimiento, pero debe ser llevado con amor y la confianzaque Dios nos está purificando, para unirnos a Él. Esta unión con él, no puede darse sino nos despegamos de nosotros mismos, sino curamos nuestro orgullo, rebeldías, prepotencias y, no nos sometemos a él con espíritu dócil y con decisión firme a abandonar nuestra voluntad para que El pueda gobernar nuestra vida. El ser humano está falto hoy, de abrirse a la acción de Dios en su vida, dejar aDios ser Dios, para que él haga de nosotros una perfecta voluntad de lo que él quiere de nosotros; y como bien dice un padre de la Iglesia, San Ambrosio: “el abandono tiene todo su fundamento en la misma caridad”. 4
No somos seres perfectos, somos seres humanos que día a día buscamos caminar en la perfección, y, La perfección consiste en hacer su voluntad, en ser lo que El quiere que seamos,Nuestro grado de perfección depende del grado de nuestra conformidad con la voluntad divina. La Fe nos hace conocer a Dios y nos muestra la bajeza de nuestra condición humana, más la conformidad a la voluntad de Dios une aún más directamente e íntimamente nuestra voluntad con la de Él, poniendo el alma al servicio completo del Dios, uno y trino. Un ejemplo claro de esa perfecta voluntad de Dios, lapodemos ver en María, debemos ser a la manera de esta mujer del Evangelio, mujer de la Palabra y de la escucha, encarnar en el interior de nuestra vida, el ser de Dios, hecho voluntad y cumplimiento, ser instrumentos de Jesucristo quien vive y lleva a feliz término, la voluntad del Padre; al hombre de nuestros tiempos, le falta ser una pequeña voluntad en las manos del Dios de la vida. Desde laAnunciación hasta el Calvario, la voluntad de la Virgen estuvo en completo abandono a la voluntad del Padre. Para ser colaboradores con el plan de Dios debemos ante todo creer que El puede hacer grandes cosas en nosotros; tener comunión con su voluntad y perseverar en esta comunión. Todo es imposible si anteponemos nuestro deseo y voluntad. La docilidad de corazón y la completa apertura a su plan eslo que hace que florezca esa intimidad con Dios. Es como si nosotros deseáramos ayudar a una persona en algo, pero cada vez que esa persona nos pide algo nosotros deseemos imponer nuestra voluntad y la manera en cómo debe ser realizado, sin dejar que las cosas se realicen como ya ella lo tenía estipulado. Lógicamente que hará más difícil el poderlo realizar, que si con una actitud sumisa nossometemos simplemente a ayudar a la persona cumpliendo lo que ella desee, entrando en comunión con su plan.
Por ello, la falta de conocimiento acerca de cuál es la voluntad de Dios en medio de la Iglesia y, en el de los Creyentes, es, y ha sido un grave problema que ha afectado y afecta aún a la gran mayoría de los Cristianos católicos y no católicos.
Es necesario saber que la Voluntad de Diossolamente puede conocerse por medio de Su Palabra y la asistencia del Espíritu Santo. Estos son los dos ejes esenciales.
 
Jesucristo mismo dice: “No he venido para hacer mi voluntad, sino la de Aquel que me ha enviado...”. Él conocía cuál era la voluntad del Padre, se complacía en hacer la voluntad del Padre. Si Jesucristo pudo conocer la voluntad del Padre; Si Pablo pudo conocer la voluntad del...