las baterias
Gente celebrando una fiesta en un jardín, en Canadá.
Cualquier circunstancia, siempre que sea positiva, es apropiada para la organización de una fiesta. Por ejemplo, el final de los exámenes, el inicio de las vacaciones, un acontecimiento familiar (boda, bautizo, comunión, etc.) son situaciones más que propicias para celebrar una fiesta. Sin embargo, el acontecimiento porexcelencia que engendra la mayoría de las fiestas es la celebración de un cumpleaños.
Los días en que mejor se acoge la convocatoria para una fiesta son, por razones obvias, las vísperas de festivo y fines de semana, es decir, los sábados. Para formalizar la convocatoria de la misma, hay que tener en cuenta, lógicamente, la fecha de dicha celebración, además de las costumbres de los invitados.Si se establece, por ejemplo, en vísperas de Semana Santa o de otra festividad señalada, lo más probable es que la mayoría de tus futuros asistentes se encuentren de viaje o en su segunda residencia. Por eso hay que ser precavido.
No es conveniente organizar una gala el día de la inauguración de las Olimpiadas o el día de la final de la copa del mundo de fútbol si muchos de los invitados sonaficionados al deporte. Del mismo modo, puede que no sea buena idea montar una fiesta cuando se celebre un espectáculo relevante en la ciudad, como por ejemplo: un concierto, se juega un partido, etc. En definitiva, hay que atar todos los cabos para cerciorarse de que puedan acudir la mayoría de los invitados.
Salvo para fiestas infantiles o de personas mayores, las últimas horas de la tarde ytoda la noche, sin limitaciones constituyen momentos preciosos para la organización de un festejo. La noche tiene un encanto misterioso y bohemio que invita a la desinhibición y la búsqueda de nuevas sensaciones.
La hora de comienzo, por su parte, dependerá tanto de la edad de los participantes, como de la índole de la reunión. Por lo demás, hay que tener en cuenta que la hora de convocatoriapuede llevar implícitas determinadas obligaciones: por ejemplo, en una reunión que comience a las ocho de la noche, los invitados entenderán que se va a saciar su hambre con unos entremeses
El lugar[editar]
El lugar de celebración de una fiesta no es determinante para conseguir un gran éxito. Una celebración festiva puede ser igualmente divertida en un local público, en una casa particular, en unsolar o en un pabellón de deportes. Lo que sí resulta verdaderamente importante es que la capacidad del recinto sea la adecuada al número de asistentes. Una veintena de personas bailando en una plaza de toros difícilmente lograrán divertirse por más esfuerzos que realicen. Por ello es preciso calcular primero el número de asistentes a la reunión. Lo importante es que se encuentren cómodos durantela fiesta pero que el espacio no sea tan amplio como para perder la sensación de unidad. Si hay que escoger entre quedarse corto o que sobre terreno, es preferible pecar de lo primero, ya que el éxito de toda celebración reside en que los invitados se sientan miembros de un grupo y tengan la posibilidad de comunicarse con todos ellos.
Si se estima que el sitio escogido excede en muchos metroscuadrados de lo necesario, hay que intentar acotarlo de la manera más discreta. Dependiendo del lugar de celebración, se presentan diferentes soluciones:
En una casa particular, clausurando algunas habitaciones periféricas se conseguirá reducir el espacio hábil.
Para lugares abiertos (jardines, campos, plazas, etc.), las soluciones que se presentan son múltiples: vallas, barreras naturales(setos, arbustos...), cintas atadas a los árboles, etc.
Cuando hablamos de un restaurante que no tiene comedores individuales, poner un biombo separador constituye el recurso más socorrido y habitual.
En un bar, se puede limitar el acceso a una parte del mismo.
Niños con linterna de estrella-formó en la fiesta de "Medio-otoño" en Vietnam.
Es conveniente designar un lugar principal en el que...
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