Las horas no impartidas
Tenemos un conflicto en cuanto a la educación, se ha hablado mucho sobre si la necesidad de cambios en cuanto a planes y programas, para mejorar esta crisis, pero el problema no esta en esos planes y programas más bien es en las personas que los ejecutan. La propuesta es que el profesor sea un precursor de la enseñanza con la sensibilidad, afectividad,que debería ser característica indiscutible (hombre o mujer), así como también el conocimiento adecuado de las planes y programas, para su completa adaptación al aula, actualmente toda la preparación recibida se refleja en el aula en lo cognoscitivo, se busca tener los mejores promedios por materia, se compite por subir una milésima en comparación al año anterior, los módulos son escasos en cuantotiempo, pero también nadie da un poco mas de ese tiempo, y el alumno, sus sentimientos, emociones, quien se ocupa de ellos. La formación integral esta descuidada, el alumno se le enseña a destacar, prueba de ello son los innumerables concurso académicos, que cada año la U.S.E.T impone y hace gala de los resultados obtenidos a nivel nacional, que hizo el maestro, solo el de hacer un alumno destacadopor su memoria por sus aptitudes al hacer gala de un examen teórico o practico.
La docencia es un arte, un oficio o una profesión; si bien cumple con algunos requisitos que la ponen en la última categoría, es diferente de otras profesiones que se definen por un alto status social y por la autonomía de decisión de sus miembros1.
El trabajo docente es un arte, -claro- se tiene que tenercierta habilidad técnica, que sin duda se obtiene de la profesión, esta es la habilidad especializada o concreta hacia la educación, siendo necesaria. Pero por que no un oficio, ya que no todo es moldear, con habilidad y técnica, también es la práctica diaria, y que al paso del tiempo hace a un buen docente.
Entendido el magisterio como oficio o arte, algunos autores exigen del oficiante“además de habilidades y conocimientos, sensibilidad, la conciencia de las propias habilidades y el compromiso de desarrollarlas en el contexto del desempeño diario” (Pratte y Rury 1991:64). Esta caracterización supone una conciencia del oficio —que sería inexistente en el moderno profesional independiente— y que se adquiriría en comunidad con otros practicantes (Pratte y Rury:64; también Green, citado enel mismo trabajo).
Para comprender los problemas que rodean al alumno se debe estar empapado con el contexto en el que se va a trabajar, “la comprensión de los problemas socio-culturales y psicológicos y el dominio de las materias son algunos de los rasgos que se atribuyen al perfil profesional del maestro” (Hansen 1988).
Bien, dicho lo anterior la carrera docente se le ve como una profesiónque se escoge con el fin de ganarse la vida y que, de alguna manera, podemos cambiar si nos place. Es por ello que maestros y aspirantes a maestros han perdido la cualidad que los ennoblecía: ahora ha perdido su mística y con ello su desvalorizado función social del maestro. “ya son pocos los apóstoles de la educación, son muchos los profesionales de a educación y hay voces que incluso quierenconvertirlos a técnicos.”1
1 La imagen del rol docente *Regina E. Gibaja*
2 T. Valencia, A. Revista Mexicana de Pedagogía Pág. 4
“El día en que ”los profesores tomen conciencia de que su practica docente diaria, debidamente reflexionada, evaluada y comunicada, pueda constituir una aportación insustituible a la construcción de los saberes pedagógicos (teóricos y prácticos), en una especie desolidaridad epistémico racionalmente organizada, ese día los profesores habrán encontrado una motivación intrínseca para su profesión ( autoestima de su tarea, hoy muy baja), el perfeccionamiento permanente del profesorado habrá entrado en una vía segura de institucionalización y la escuela habrá dejado de ser un lugar monótono para la rutina y el desencanto, convirtiéndose en una tarea...
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