Las Posadas

Las posadas: un vistazo a mi niñez

Escrito por: Ana Georgina Alanís Núñez



Índice:

• Recordando, a través de los relatos de mamá, las posadas en mi familia (tradición que solo viví en la niñez)
• Las cancioncitas de las posadas
• ¿Qué pasó con las posadas?




Recordando, a través de los relatos de mamá, las posadas de mi familia (tradición que solo viví en laniñez)

A pesar de ser las posadas una tradición muy significativa en mi familia, para evocar esos recuerdos tuve que recurrir a los relatos de mi madre, pues yo hube de vivirlas solamente durante mi niñez, y mis recuerdos son muy vagos. Los relatos de mamá, que además resultaron estar plagados de maravillosas anécdotas, me parecieron una ventana al pasado.

Yo fui criada en un hogar católicocon una historia muy peculiar respecto a las posadas. Por un lado, mi familia materna tenía muy arraigada la costumbre de celebrar las posadas y, por el otro lado, mi familia paterna no las festejaba.

Las posadas las conocí, las viví y las comprendí gracias a mi abuela materna, quien fuera catequista desde muy joven y le alegraba participar en las actividades de la iglesia de su pueblo natal:Ario de Rosales, Michoacán. Ella gustaba de organizar las posadas en su pueblo y fue en una de ellas donde conoció a mi abuelo.

Cada año se hacía en la casa de los abuelos una de las nueve posadas que celebra la tradición católica (por razones de economía no se festejaban las nueve), en ella participaba toda la familia y era organizada por mi abuela. Mi familia materna era numerosa, mi abuelohabía tenido 9 hijos, los cuales a su vez tenían hijos y pareja, por lo cual resultaba muy costoso llevar a cabo las 9 posadas.

Existían actividades que antecedían a las posadas, como hacer la piñata (símbolo de los pecados), lo cual se hacía una semana antes de que se celebrase la posada. En esta actividad participaban sobre todo los niños, y recuerdo que era algo que yo disfrutaba mucho. Concapas de engrudo y papel periódico cubríamos una olla de barro y luego la dejábamos secar para, al siguiente día, repetir el proceso. Cuando la olla estaba cubierta de aproximadamente 10 capas de papel periódico, se le añadían 7 picos hechos de cartón a modo de cucurucho (que simbolizan los 7 pecados capitales) y adornos de papel china.

El día de la posada las familias se reunían por la mañana,los hombres llevaban leña, mientras las mujeres se encargaban de pelar la fruta y hacer el ponche. Cuando hombres y mujeres terminaban estos deberes, se retiraban a sus casas.

Por la tarde se reunían todos en la casa de los abuelos, que era muy grande y se prestaba para la ocasión, y se comenzaba por el rezo. En la sala de la casa de los abuelos se reunían todos y se rezaba un rosario que,al término de cada misterio, se acompañaba de una pequeña cancioncita; después del rosario, se rezaba la letanía. Los niños a menudo estábamos impacientes, inquietos o dormidos.

Terminando de rezar, la abuela ofrecía colaciones en una tasa: 2 colaciones de color y las demás blancas. Cada niño escogía una colación, y los dos que escogían colación de color cargaban los peregrinos. Los peregrinoseran figuras de San José, el burro y la Virgen María, hechas de barro, que se colocaban sobre una tablita; en la casa había muchas, pues mi abuelo era carpintero, y sobre la misma tablita se ponían 2 veladoras.

La familia se dividía en grupos: algunos se quedaban dentro de cuartos y los otros cargaban los peregrinos, llevaban velitas y pedían posada a los que se quedaban dentro de los cuartos.En las 3 primeros ocasiones, en los cuartos se les negaba la posada a los peregrinos y en la cuarta se les dejaba pasar.

Se les debía dar posada a los peregrinos en el cuarto en el que se rezó el rosario, ahí mi abuela quitaba de la tablita a los peregrinos y los colocaba en el nacimiento. En seguida comenzaba a cantar unos versos que incluían el nombre de una persona, esta persona entonaba...