“Las relaciones entre estado y mercado, ¿Un juego de suma cero?”. Alberto Bonnet. El país invisible. Debates sobre la argentina reciente. Ed. Continente. 2001.

 “Las relaciones entre estado y mercado, ¿Un juego de suma cero?”. Alberto Bonnet. El país invisible. Debates sobre la argentina reciente. Ed. Continente. 2001.

Alberto Bonnet comienzaintroduciéndonos en el texto diciendo que para justificar las privatizaciones por venir a mediados de los ochenta, los sectores progresista afirmaban que el estado debía jugar el papel de espectador del mercado,haciendo falta un estado reducido, pero a su vez con mas actividad empresarial.
La primera mitad de los 90, ya realizadas las privatizaciones, los conservadores hablaban sobre las mismasdividiéndolas en etapas: en 1989 el sector publico estaba en un grado de degradación y anulación de su capacidad de servicio, que fomento la reforma del estado, aunque estuvo muy lejos de completarla; desde1989-91 se llevaron a cabo dichas reformas; y a partir de 1991 hasta 1995 con la ley de convertilidad, las instituciones fundamentales de la gestión económica del estado, pudieron reconstruirse.Refiriéndose a las instituciones: “junto a las políticas de desregulación y a buenos marcos regulatorios, hicieron posible completar exitosamente el programa de privatizaciones, eliminar gran cantidad deorganismos públicos de nula utilidad social y eliminar la mayor parte de los subsidios indiscriminados que el Estado había estado entregando”. Mientras que por su lado, los progresistas afirmaban que larelación Estado-sociedad se caracterizaba por “mayor determinación de lo económico sobre lo política, de lo transnacional sobre lo nacional y de lo individual sobre lo colectivo (…) el estado ya no logramas éxito en el manejo autónomo de su economía, se desentiende y flexibiliza el conflicto capital-trabajo”. Los izquierdistas criticaban las privatizaciones diciendo que en América Latina había“mucho menos estado y mucho más mercado”.
Bonnet, critica la posibilidad de que la concepción de esta relación de Estado y mercado tenga una suerte de un juego de suma cero. Como primer argumento...