Las relaciones transatlánticas de Estados Unidos: en la diferencia entre dominación y hegemonía

Las relaciones transatlánticas de Estados Unidos: en la diferencia entre dominación y hegemonía
¿De qué trata el texto?
Es importante distinguir la hegemonía de la dominación, tal como Maquiavelo, Gramsci, y Nye han argumentado. Esta distinción permite apreciar que durante el primer gobierno de Bush, los Estados Unidos trataron de ser una potencia dominante en lugar de una hegemónica. Así,una larga lista de afirmaciones de las proyecciones de poder dominantes esencialmente unilaterales, en realidad están reforzadas por dos pilares: el primero, el poder duro, pero también el excepcionalismo estadounidense. En comparación con Europa, la versión de George W. Bush del excepcionalismo estadounidense enfatiza la soberanía tradicional y absoluta del Estado, una depreciación correspondientedel derecho internacional y de la organización, el parroquialismo, y el multilateralismo no muscular. Por todo esto los EE.UU. es en gran parte responsable de la crisis en el atlántico. Los europeos, sin embargo, han hecho sus propias contribuciones a esta crisis. Por ello, la crisis debe resolverse mediante la gestión de diversos problemas internacionales que requieran la cooperacióntransatlántica. Afortunadamente, hay señales de movimiento hacia esta cooperación, aunque las señales son mixtas en el lado estadounidense.
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Los Estados Unidos son ampliamente percibidos como un país que actúa más como un poder dominante que como uno hegemónico. Por eso, se afirma que el poder unilateral de USA que se refleja no sólo en Irak desde el 2003, sino también en otras cuestiones como la oposicióna la Corte Penal Internacional, han sido la razón principal de la crisis en el atlantismo. Este neoliberalismo ha sido parte de la construcción de un imperio informal norteamericano en el que Europa, las alianzas, la seguridad colectiva y el derecho internacional juegan un papel menor. Pese a ello, los europeos también han hecho sus contribuciones a las relaciones que de por sí, ya son bastantetensas. Hay que indicar que, sí persisten estas tensiones y desacuerdos de hecho, abiertos, el mundo estará peor. La cooperación transatlántica es necesaria, aunque no suficiente, para gestionar toda una serie de temas globales. Afortunadamente, hay algunas áreas de cooperación entre estos aliados de larga data por lo que, es posible que algunas de las diferencias más pronunciadas puedan sermediadas o silenciadas. De lo contrario, la crisis transatlántica creará una espiral descendente que dará como resultado más tensión y desorden internacional. Aun así, se trata de un mundo en gran medida unipolar, en el que Europa seguirá siendo el socio menor en el atlantismo.
I. Sobre la dominación y la hegemonía.
Desde Maquiavelo, Gramsci y Joseph S. Nye, Jr., se ha reconocido desde hace tiempo quelas grandes potencias inteligentes no se basan en la dominación, la coerción y el poder duro solamente. Maquiavelo puede ser famoso por la línea de que es mejor ser temido que amado, pero también argumentó que la mejor situación es la combinación de miedo con respeto. El respeto se produce cuando otros aprecian los fines a los que sirve el poder. Del mismo modo, en la vista de lo culturalmarxista, Antonio Gramsci consideraba que las grandes potencias consiguen asegurar la cooperación voluntaria de manera más eficaz o incluso sin pensar en los demás sí, son las ideas hegemónicas y los hábitos los que importan: los capitalistas burgueses convencen a otros, por ejemplo, que la propiedad privada y el libre mercado son buenas. En esa situación, la costosa coacción es innecesaria para hacercumplir la aceptación de estas ideas. Además, una vez estas ideas se tornan habituales y por lo tanto irreflexivas, se asegurarían los objetivos de la potencia hegemónica. Así, para Joseph P. Nye, quien como funcionario de Estados Unidos concordó con ciertas ideas del marxismo cultural o materialista, el actor dominante se convierte en un actor hegemónico mediante la inducción de la cooperación....