(N. 2803-2856. Resmenes 2857-2865) El primer grupo de peticiones (tres) nos lleva hacia l para l santificado sea (...) venga (...) hgase (...). El segundo grupo de peticiones (cuatro) son la ofrenda de nuestra esperanza y atrae la mirada del Padre de las misericordias danos (...) perdnanos (...) no nos dejes (...) lbranos. 1. Santificado sea tu Nombre. 2. Venga a nosotros tu Reino. 3.Hgase tu voluntad en la tierra como en el cielo. 4. Danos hoy nuestro pan de cada da. 5. Perdona nuestras ofensas como tambin nosotros perdonamos a los que nos ofenden. 6. No nos dejen caer en la tentacin. 7. Y lbranos del mal. 8. La doxologa final. Santificado sea tu Nombre El trmino santificar no hay que entenderlo en sentido causativo, ya que Dios es Santo, slo l santifica y hace santo. Hayque entenderlo en un sentido estimativo reconocer como santo, tratar de una manera santa. Es a la vez una alabanza y una accin de gracias. Pedir que el Nombre de Dios sea santificado, tambin, nos compromete para que seamos santos e inmaculados en su presencia, en el amor (Ef 1, 4). La escritura llama Gloria a la manifestacin en la historia y en la creacin de la santidad divina. Quin podrasantificar a Dios puesto que l santifica Inspirndonos nosotros en estas palabras Sed santos porque yo soy santo (Lv 11, 44), pedimos que, santificados por el bautismo, perseveremos en lo que hemos comenzado a ser. Y lo pedimos todos los das porque faltamos diariamente y debemos purificar nuestros pecados por una santificacin incesante (...) Recurrimos, por tanto, a la oracin para que esta santidadpermanezca en nosotros (San Cipriano de Cartago). Depende inseparablemente de nuestra vida y de nuestra oracin que su Nombre sea santificado entre las naciones. Si nosotros vivimos bien, el nombre divino es bendecido pero si vivimos mal, es blasfemado, segn las palabras del Apstol el nombre de Dios, por vuestra causa, es blasfemado entre las naciones (Rm 2, 24). Por tanto, rogamos para merecertener en nuestras almas tanta santidad como santo es el nombre de nuestro Dios (San Pedro Crislogo). Esta peticin, que contiene todas, es escuchada gracias a la oracin de Cristo, como las otras seis que siguen. Padre santo, cuida en tu Nombre a los que me has dado (Jn 17, 11). Venga a nosotros tu Reino La palabra basileia en el Nuevo Testamento se puede traducir por - Realeza(nombre abstracto) - Reino (nombre concreto) - Reinado (nombre de accin, de reinar) El Reino de Dios es para nosotros lo ms importante. Se aproxima en el Verbo encarnado, se anuncia a travs de todo el Evangelio, llega en la mente y Resurreccin de Cristo. El Reino de Dios adviene en la ltima Cena y por la Eucarista est entre nosotros. El Reino de Dios llegar en la gloria cuandoJesucristo lo devuelva a su Padre. Esta peticin expresa el deseo de la venida de Cristo en gloria, es el Marana Tha, el grito del Espritu y de la Esposa Ven, Seor Jess. Incluso (...) puede ser que el Reino de Dios signifique Cristo en Persona, al cual llamamos con nuestras voces todos los das y de quien queremos apresurar su advenimiento por nuestra espera. Como es nuestra Resurreccin porqueresucitamos en l, puede ser tambin el Reino de Dios porque en l reinaremos (San Cipriano de Cartago). En la oracin del Seor, se trata principalmente de la venida final del Reino de Dios por medio del retorno de Cristo. Pero ese deseo no distrae a la Iglesia de su misin en este mundo, ms bien la compromete. Porque desde Pentecosts, la venida del Reino es obra del Espritu del Seor a fin de santificartodas las cosas llevando a plenitud su obra en el mundo. El Reino de Dios es justicia, gozo y paz en el Espritu. En el estado actual est en tensin, en combate entre la carne y el Espritu. Slo un corazn puro puede decir con seguridad Venga a nosotros tu Reino Es necesario haber estado en la escuela de Pablo para decir Que el pecado no reine ya en nuestro cuerpo mortal (Rm 6, 12). El que se...
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