LAS TEORIAS SOBRE ESTRUCTURA FINANCIERA OPTIMA
Toda oportunidad de inversión real está acompañada, y al mismo tiempo
condicionada, por decisiones de financiación; éstas a su vez determinan la
composición del capital entre deuda y recursos propios. Lo anterior se refleja en la
estructura financiera adoptada por la empresa, luego de ser considerados aspectos como costo de la deuda, presión fiscal, riesgo de quiebra, entre otros.
Dos enfoques teóricos modernos intentan dar explicación a esa composición del
capital, y por ende a la estructura financiera: por un lado, la Teoría del Equilibrio
Estático (Tradeoff Theory) considera la estructura de capital de la empresa como
el resultado del equilibrio entre los beneficios y costos derivados de la deuda,
manteniendo constantes los activos y los planes de inversión (Myers, 1984); por
otro lado, la Teoría de la Jerarquía Financiera (Pecking Order Theory) expone la
preferencia de la empresa por la financiación interna a la externa, y la deuda a los recursos propios si se recurre a la emisión de valores (Myers, 1984).
Las teorías modernas antes mencionadas tienen su punto de partida en la
discusión de la idea de Modigliani y Miller (1958) en cuanto a la irrelevancia e
independencia de la estructura de capital con relación al valor de mercado de la
empresa, pues el valor de la misma está determinado por sus activos reales no por
los títulos que ha emitido. Lo anterior tiene lugar en presencia de mercados
perfectos, en los cuales la deuda y los recursos propios pueden considerarse
sustitutos.
TEORÍA DE MODIGLIANI Y MILLER.
Estos autores fueron los primeros en desarrollar un análisis teórico de la
estructura financiera de las empresas cuyo objetivo central es estudiar sus efectos
sobre el valor de la misma. La teoría tradicional plantea que la estructura financiera óptima será aquella
que maximice el valor de mercado de la empresa y minimice el costo del capital.
Esta estructura de no ser apropiada puede representar una restricción a las
decisiones de inversión y por lo tanto, al crecimiento de la empresa.
Este análisis consta de dos etapas: en una primera etapa, establecen la
independencia del valor de la firma respecto a su estructura de financiamiento, en
una segunda etapa, la toma en consideración del impuesto sobre el ingreso de las
sociedades los conducen a concluir que hay una relación directa entre el valor de
la empresa y su nivel de endeudamiento.
En ella participan las variables de ingresos, costos variables, costos fijos, depreciaciones, intereses financieros, impuestos, costos de deuda, costos de
capital. Todas estas variables interrelacionadas permiten definir la rentabilidad
financiera de la organización. La tesis de M&M se fundamenta en tres
proposiciones las cuales son:
Proposición I de M&M
. Explica que el valor de la empresa sólo dependerá de la
capacidad generadora de renta de sus activos sin importar en absoluto de dónde
han emanado los recursos financieros que los han financiado; es decir, tanto el
valor total de mercado de una empresa como su costo de capital son
independientes de su estructura financiera, por tanto, la política de endeudamiento
de la empresa no tiene ningún efecto sobre los accionistas (Brealey y Myers,
1993).
Proposición II de M&M
. Explica que la rentabilidad esperada de las acciones
ordinarias de una empresa endeudada crece equitativamente a su grado de
endeudamiento; es decir, el rendimiento probable que los accionistas esperan
obtener de las acciones de una empresa que pertenece a una determinada clase, ...
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