Laura

Más allá del innovador sistema de troqueles en estas PASO, al que cada presidente de mesa le puso su estilo para cortarlo: tijera o regla; y de que los sobres no tuvieran pegamento y hubiera quepasarle la lengua unas cuántas veces para que pegara; estas elecciones también dejaron algunas perlitas, bloopers y denuncias por doquier.



La perlita más llamativa se dio en Río Grande, cuando unapresidenta de mesa se presentó borracha a ejercer sus funciones en el colegio Haspen y tuvo que ser reemplazada por un votante. "La mujer no podía mantenerse en pie ", dijo un fiscal general.Aparentemente la señora en cuestión anoche se fue a “una fiesta con gente amiga y familiares" y desde allí fue “directamente a presidir la mesa”. Los testigos afirmaron que “no estaba en condiciones dehacerlo".



Peor le fue Javier Diganchi, de 29 años, cuando hoy fue a votar a la escuela de Campo Contreras de la capital de Santiago del Estero y terminó preso. Pequeño detalle: el detenido estabaprófugo de la Justicia Federal desde hace más de tres años por causas que infringen la Ley de Estupefacientes.



Más de un futbolero al que le tocó votar en la mesa N° 5922 de la escuela N° 22 deBelgrano se debe haber sorprendido cuando encontró como fiscal a René Houseman, una gloria de Huracán, que se presentó tempranito y dijo: “Quiero fiscalizar para la Presidenta”.



Uno de losbloopers de la tarde llegó directo a la redacción de Clarín.com. Fue cuando pasado el mediodía Graciela CH. de Avellaneda llamó enojadísima porque ni ella ni su hijo pudieron votar en una escuela de la calleDonovan. ¿La razón? Se negaron a sufragar porque “faltaban las boletas de Pino Solanas y Lilita Carrió”. El tema es que ambos son candidatos a senador y diputada por Coalición Sur pero en Capital, noen provincia de Buenos Aires.



Mientras que el enojo de Juan Carlos Salerno, de 56 años, y de su mujer Silvia tenía motivos de sobra. Ellos le contaron a este diario que en la escuela de la...