Lej Lejá
2º Parte Lej lejá
La semana pasada vimos la vida de un hombre muy valiente
llamado Abram. Abram tuvo que salir de su tierra y por el camino hacia la Tierra que Dios le había prometido, se tuvo
que enfrentar a algunos obstáculos y peligros. Al pasar por
Egipto el Rey se enamoró de su esposa Saray y Dios tuvo que
enviar algunas plagas para rescatarla, luego su sobrino Lot quedó atrapado en manos de unos salvajes y Abram salió a su
encuentro para salvarlo.
En el momento donde se encontraba más tranquilo, Dios le habló y le dijo: Abram yo siempre estaré contigo, pero ¿que más te puedo dar que aún no tengas?.
Abram pensó en todas las cosas buenas que Dios le había dado, pero había algo que aún no tenía …..¿ Recordáis que era ? …. Exactamente! Un hijo. Como Dios conocía su corazón, le
dijo: “Abram mira las estrellas, así será tu descendencia” … Y Abram le creyó a Dios. Pasó un tiempo y Saray su mujer seguía sin tener hijos, así que ella pensó: ¿Y si le doy a mi
sierva Agar, quizás lo obtengamos de ella?. Entonces Abram durmió con Agar y ella quedó embarazada. Pero Saray y Agar no se llevaban bien. Mientras Agar estaba embarazada empezó
a mirar con desprecio a Saray porque ella no podía tener hijos. Entonces Saray se enfadó y la
echó fuera de su casa. Agar lo pasó muy mal y un ángel de Dios se le apareció diciendo: “Agar disculpate por lo que has hecho y vuélvete a la casa de Saray, porque en tu vientres llevas un
bebé, al cual pondrás por nombre Ismael, porque Dios escuchó tu tristeza” Agar volvió, pidió disculpas, y en esos días nació Ismael, un bebé precioso.
Pasado algún tiempo cuando Ismael tenía catorce años, Dios le habló a Abram su padre y le dijo: Abram, te has portado muy bien durante este tiempo y quiero bendecirte. Desde hoy
cambiaré tu nombre y ya no te llamarás más Abram, sino Abraham que significa “Padre de ...
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