Lenguaje Y Política

“La participación política como forma de lenguaje: la libertad y mecanismos de participación en el Estado moderno”

Profesor: Miguel Ruiz
Sergio Acevedo

El lenguaje y la política son elementos de la sociedad intrínsecamente relacionados. Es más, incluso hay autores (Canel, 1999; Gerstlé, 2005) que afirmar que la comunicación, el lenguaje es político en sí. Sin lenguaje no habría política,ni políticos, ni posturas políticas. Por lo mismo, la discusión sobre cómo impacta el lenguaje por sobre la política no está indiferente del sistema político en el que se desarrolla. Así en una democracia plena, el lenguaje funcionará como articulador de posiciones políticas que competirán por llegar al poder por medio de los partidos políticos. Sin embargo, en un sistema totalitario, el lenguajefunciona como un vector unidimensional que determinará la posición política del pueblo.
Por lo mismo, antes de entender las formas contemporáneas de participación política, discutiré diferentes concepciones sobre la libertad y el rol del Estado.
La discusión teórica en torno a la concepción de la libertad en su forma política, ha configurado dos claras formas de entender la idea de acciónpolítica, y del rol que debiese jugar el Estado dentro de la sociedad. Si en un primer lugar, la discusión se dio entre una concepción negativa o positiva de la libertad, tras el transcurso del tiempo, aparecieron opciones intermedias como una escuela neo-aristotélica, representada en Hannah Arendt (1987) o el republicanismo que recoge Pettit (1998).
Los pensadores republicanos clásicos, extrapolaronla libertad del Estado a la libertad de un individuo. Estos pensadores veían que “un Estado libre es aquel capaz de actuar según su propia voluntad, en pos de sus propios fines” (Skinner, 2004: 104) y que además “no está sujeto a restricciones externas”(Ídem). Un estado con estas atribuciones, es decir, republicano, servirá al mismo tiempo como garante de una libertad individual para losciudadanos. En este sentido, el Estado debe estar activamente comprometido en salvaguardar las distintas inclinaciones de cada ciudadano reconociendo a su vez, que serán los mismos ciudadanos los que “valorarán la libertad como medio para lograr distintos fines. (…) En suma, ser libre es simplemente tener la facultad de perseguir cualquier fin que nos propongamos sin restricciones.”(Skinner, 2004: 105)Las mismas características de un Estado libre son las que poseían los individuos libres bajo la concepción republicana. Tanto como para Pettit (1998), como para Skinner (2004), esta idea republicana de libertad toma elementos de las dos grandes y en su tiempo, contradictorias ideas de libertad. Por un lado la concepción negativa de libertad, que se basa en la “ausencia de alguna otra cosa;específicamente, por la ausencia de cierto grado de coerción que le impida al agente ser capaz de actuar en pos de sus propios fines” (Skinner, 2004: 94-95), y en la libertad positiva “del deseo por parte del individuo de ser su propio amo.” (Berlín, 1998: 60) Esta nueva idea política es tanto negativa en referencia a la necesidad de la presencia de dominación ajena y al mismo tiempo es positiva alrequerir de un contexto de seguridad frente a la arbitrariedad de una posible interferencia.
La idea republicana de libertad como no-dominación en Pettit (1998), parte del supuesto de que la libertad es un concepto cívico, es decir, se da en la ciudad o en la comunidad política y en permanente contacto con los demás, y con las instituciones del Estado. Con esto, Pettit (1998) hace la diferencia de lano-interferencia con la no-dominación. Ya que, el nuevo concepto de no-dominación, da espacio a la interferencia, siempre que no sea de modo arbitrario, y con el único fin de empeorar la vida del afectado.
Para crear un clima político social que permita la aplicación de la libertad como no-dominación, las acciones políticas individuales y las del Estado, deben estar orientadas a fomentar la...