Lenguas

La noche estaba por caer, pronto la ciudad quedaría en total penumbra, el sol se ocultaba con rapidez, aunque, realmente hace bastante tiempo que el sol no era una verdadera luz. No existía más el silencio, siempre estaba opacado por un escalofriante y permanente lamento, sin embargo algo más rompió el silencio aquel atardecer. Cuatro chicos corrían a todo lo que daban sus piernas; Saúl, Jenny,Allison y Eduardo eran amigos desde muy niños, siempre habían vivido en la misma calle y estudiado en las mismas escuelas, fue quizás su gran amistad lo que les ayudo a permanecer juntos ante tal desgracia.
─ Jenny corre más rápido.
─Eso intento Ed pero no puedo, estoy muy cansada.
─Demonios, jamás se cansan, vienen tras nosotros.
─Ahí, hay que entrar ahí. ─dijo Saúl señalando un pequeñonegocio justo a la derecha de ellos. Entraron con desesperación, atrancaron la puerta.
─No pudimos elegir mejor lugar ─ exclamó Jenny.
─ ¿Qué es lo que hicimos? ─Dijo Ed alarmado, se encontraban en una joyería, las paredes al lado de la entrada era solo vidrio.
─Espera, solo había una joyería en esta calle ¿no es así?
─Si pero, el problema es…
─no miro el problema si rompen los vidrios seactivaran las alarmas y así vendrá la p…─Todos miraron con Jenny. ─ Lo siento, que estupidez.
─Miren justo enfrente esta la armería. ─Dijo Allison señalando por las grandes ventanas.
─ ¿Cómo puedes recordarlo?
─Es ahí donde trabajaba Diego no es así.
─Si pero eso ya es un pasado muy lejano, mi hermano murió, no hay más.
─Disculpa.
─No tenemos tiempo de ponernos al llanto, tenemos quesobrevivir.
Los tres acertaron. Miraron por la ventana, en busca de peligro más como no lo encontraron.
─Parece seguro. Vamos, rápido, ninguno se detenga por circunstancia.
La distancia era bastante larga, además de la gran cantidad de autos arrumbados, sería muy difícil, mas no tenían otra opción debían intentarlo para salvar su vida. Salieron con lentitud de la joyería, y tras darse cuenta de que nocorrían peligro, corrieron cuanto sus piernas les permitieron, más cuando parecía que lo lograrían unas manos descarnadas sujetaron fuertemente la pierna de Jenny, Saúl corrió a ayudarla, lo consiguió Jenny salió ilesa sin embargo un zombi salido de un auto sujeto a Saúl por la espalda y comenzó devorarlo, sus tres amigos querían ayudarlo.
─ NOO, sálvense, ya es tarde.
Corrieron todo lo quesus piernas les permitieron, con el sonido de los gritos de Saúl torturando sus oídos. Lograron llegar a la armería mas no estaban satisfechos, perdieron un gran amigo y eso los asustaba. El lugar estaba vacío, pero en aquellos momentos en un paraíso, Allison les dijo.
─ no es necesario llevarnos todo basta con que nos llevemos un par de armas cada uno y todos los cartuchos que encontremos.
Ellamiro una Granada, ya no se oían los gritos de Saúl, la tomó.
─ ¿qué vas a hacer con eso? ─ preguntó Ed.
─ no dejare en ninguno de mis amigos se transforme en un monstruo.
─ deja lo are yo.
Eduardo salió y volvió corriendo un fuerte estruendo lo siguió.
─se dan cuanta que ese ruido atraerá a los zombis─ dijo con tranquilidad Jenny.
─No lo pensé ─ admitió Allison. ─ vámonos.
─y ¿A dónde?
─Diego siempre me conto que había un túnel en la armería, no recuerdo hacia donde va pero si no mal recuerdo, es casi afuera de la ciudad.
─Pues vámonos ya.
Allison los guio por una puerta y pronto se encontraron en un inmenso túnel, caminaron unos minutos y regresaron a la superficie. De pronto escucharon un ruido. Jenny llevaba con ella el teléfono de Saúl, el sonido atraería a los zombies ensegundos; contesto.
─Hola.
─Saúl.
─Amm soy su amiga.
─¿Aun vive Saúl?
─Lo siento.
─escucha no importa si Saúl no puede venir con migo, el quería que estuvieran a salvo, soy su hermano, traten de llegar al campanario ahí los veré, y saldremos de esta ciudad. ─ El chico colgó.
─Sera mejor que vallamos, ─ dijo Eduardo.
─¿Qué? No sabemos quien es y he visto demasiadas películas de …
─Crei...