Leviatan

Leviatán. Thomas Hobbes
Todos los hombres somos iguales por naturaleza. Algunos son más agiles con la razón y otros son más fuertes físicamente, pero al final la naturaleza se encarga de que allá un equilibrio, como bien dicen vale más maña que fuerza, todo es eso mañana y conspiración.
La prudencia no es sino experiencia. Todos los hombres son iguales, todos llegan a tener la mismaexperiencia, todos tienen la misma sabiduría, solo que nadie puede percatarse de ello, de que al final todos somos iguales, porque los talentos, la sabiduría, la experiencia de los demás la vemos a distancia, en cuanto a la nuestra la vemos en nuestras manos por lo que no es más fácil decir que somos más que los demás. Un signo muy evidente de la igualdad que hay entre nosotros es que cada quien seconforma con lo que tiene, con la porción que le corresponde.
A pero junto con la igualdad viene la desconfianza, si la desconfianza de que el otro pueda ganarnos, como los dos somos iguales, los dos tenemos las misma oportunidades y posibilidades para conseguir lo que queremos. Todos queremos un mismo objeto, pero ese objeto es ilimitado, es escaso y por lo tanto no alcanza para todos.
De ahí vienela guerra, la rivalidad por conseguir lo que queremos, lo que deseamos, eso nos pone en confrontación. Pero por eso existe la razón para que podamos evitar la violencia y protegernos a nosotros mismos con la anticipación, así podremos sustituir la fuerza por la astucia hasta terminar con cada uno de los contrincantes. Debemos de buscar los medios adecuados para alcanzar nuestros fines, buscaraliados o tener una estrategia bien organizada.
Pero esto de aliarse no es un placer es más bien un desagrado tremendo, porque cada quien busca ser el ganador vencer pero solo, solo busca aliados para que sea más fácil pero al final los apuñala por la espalda.
Pero lo que nos hace a todos iguales es lo que crea una esperanza para alcanzar el objetivo. Sí, todos somos iguales en tener cuerpo y razón.En la naturaleza humana existen tres clases de disputa:
* La desconfianza
* La competencia
* La gloria
La desconfianza impulsa a los hombres a atacarse para alcanzar lo que quiere. Hace uso de la violencia para ser la dueña de las personas y poder manipularlas a su antojo.
La competencia hace que el hombre adquiera seguridad y de todo lo que tiene para logras su objetivo. Pero suverdadero oficio es la defensa.
Y la gloria es una cuestión de ego, para ganar reputación, para ensalzarse ante los demás y decir que venció a todos, los demás perdieron y él es el único que supero a todos. Esta es más sutil, busca la forma de subestimar a la gente, utilizando sus encantos, una sonrisa, una palabra, etc.
Todo esto hace que estemos en un estado de guerra permanente. Dependemos denuestra razón y nuestra fuerza para nuestra seguridad.
La guerra dura el tiempo que estemos dispuestos a luchar, que la voluntad de combatir se manifieste de modo suficiente para seguir lograrlo. El tiempo restante es de paz.
Durante el tiempo de guerra todo hombre es enemigo de los demás, los hombres no confían en otra cosas que no sea su fuerza y su razón, que es lo que les puede dar el gane.Pero lo peor de todo es que existe miedo y viven en un constante peligro de una muerte violenta. Por lo que hace que la vida se vuelva solitaria, tosca y muy breve.
Pero la naturaleza no basta por sí sola, los hombres actúan, invaden y se destruyen mutuamente. Siempre va bien armado y con buena compañía. Los deseos y las pasiones de los hombres no son malas, no son considerados pecados, peropuede existir una ley que reprima los actos a los que llevan las pasiones. Los hombres no pueden conocer las leyes entre tanto no hayan sido hechas, por lo tanto no puede cometer un delito si no existe algo que lo promulgue como delito.
En la actualidad existen pueblos salvajes que aún no tiene un gobierno establecido y viven en estado bestial.
En la guerra nada es injusto, todo es válido, hasta...