ley 789 de 2010
Introducción:
En esta reseña, nos podremos dar cuenta de las normas y reglas que tienen los trabajadores. Así como ellos cumplen esto, tienen muchos beneficios tanto como prestaciones y servicios, y también cajas de compensación, son un tipo de bonificaciones que están constituidos en el reglamento o contrato de la persona.
Esta ley, propuso ampliar la jornada laboral diurnahasta las 10:00 p.m., y reducir los recargos salariales por horas extras, dominicales y festivos, entre otras medidas incluidas en la Ley 789 de 2002. A cambio ofreció, cual culebrero, “crear 160.000 empleos por año (640.000 en cuatro años)”.
Hoy, el subempleo sigue siendo aterrador: 58%. Y el desempleo también: 13%. Algunos dicen que la reforma tuvo otros efectos positivos, como incrementar lasafiliaciones a la seguridad social. Otros dicen que la reforma generó una mejora en la calidad de los empleos. Lo cierto es que el Gobierno no ha probado que se hayan creado los 640.000 empleos prometidos.
Tampoco se sabe cuánto perdió toda la clase trabajadora con estos recortes, pero sí fueron varios billones de pesos. El sector de vigilantes asalariados, único que ha sido estudiado en forma, haperdido más de un billón desde cuando se inició este descomunal atraco: $514.400 millones entre 2003 y 2006. Cada vigilante ha perdido en promedio más de $8 millones hasta ahora ($1’151.000 por año). Esta redistribución del ingreso al revés parece ser la clave de la fórmula gubernamental de “confianza inversionista”.
Según la Constitución y los tratados internacionales, para adoptar o manteneruna política “regresiva” como ésta, “las autoridades tienen que demostrar que existen imperiosas razones que hacen necesario ese paso”. La Corte Constitucional le concedió a la Ley 789 el beneficio de la duda al respecto cuando la revisó por primera vez en 2004. En una segunda oportunidad, la Corte se abstuvo de analizar los resultados de su aplicación en 2008. Una Comisión Legislativa deSeguimiento y Verificación, creada por la propia Ley 789, también se ha abstenido de hacerlo.
Más aún, el Gobierno hizo hundir en el Congreso el año pasado un proyecto de ley que cínicamente calificó de “contrarreforma”. La contrarreforma fue la Ley 789, que luego de la Ley 50 de 1990 terminó de arrasar con una concertación histórica entre sindicatos, empresarios y Gobierno (la “Comisión de Alto Nivel”),pacto social que fue la respuesta a una aguda crisis política en 1965. Uno de sus frutos fue el decreto 2351, que abolió la “cláusula de reserva” y prohibió el despido sin justa causa para trabajadores con antigüedad superior a diez años.
El Gobierno además se ha opuesto al desarrollo del artículo 53 de la Constitución sobre derecho al trabajo y libertades sindicales. Hay quienes pretendeneliminar el salario mínimo y seguir recortando derechos sociales, como los aportes parafiscales. Lo aterrador entonces es que se persista en esa actitud regresiva, en vez de ajustarse, si no a los pactos sociales, por lo menos a los tratados interestatales. Es mejor que ese ajuste se haga internamente y pronto, como lo dispuso la propia Ley 789 (art. 46, parágrafo), antes de que un tribunalinternacional ordene hacerlo, para que no nos sigamos aterrando.
Un estudio de la Universidad Nacional, contratado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), dice que mientras los empleados perdieron ingresos, los empresarios los aumentaron en los últimos cinco años y la generación de empleos “es nula”. Procurador Edgardo Maya agita el debate al proponer el regreso del pago de horas extras.
Fecha:10/18/2007 -
Con la Ley 789, que se aprobó en diciembre de 2002, se buscaba reducirles los gastos a las empresas para que pudieran generar más empleos.
Hoy, casi cinco años después de que entró en vigencia, el procurador, Edgardo Maya, dice que hay que revisarla porque sí se redujo el costo de los empleados, pero no se aumentó el trabajo formal.
La estrategia estaba clara. El artículo 25 de...
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