leyenda de San Francisco Totimehuacan

En su cabina, haciendo guardia, el paramédico de la Cruz Roja Jorge Sánchez limpia los restos de sangre de la camilla de la ambulancia. "Otro muertito, me dice sonriendo". Son las 7 de la mañana yel frío hace más lúgubre la escena. Ya dentro de la cabina, con café en mano, accede a contarme una historia, que para él, no tiene explicación. 
"Sólo lo recuerdo como lo más terrorífico que me hapasado en mi vida"Toma un sorbo de café y empezó a narrar lo sucedido un día de enero de hace aproximadamente diez años, allá por la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacán. 
 Era ya de noche, yacasi las doce y me pidieron que llevara de urgencia a un paciente de Totimehuacan al Hospital Universitario, ahí en la 25. Estaba ahí (en San Francisco), en la ambulancia, esperando a que saliera elenfermito, cuando de repente escuché a un caballo, bueno, los cascos. Miré el espejo y vi lejos un jinete. No me pareció raro porque en esa junta auxiliar todavía se anda así, en cuacos. 
 No le toméimportancia hasta que pasó en frente de mí.  Me llamó la atención que ni tapado, iba sólo con una camisa y pantalón negro. De repente que abren en la casa y salió mi compañero con la camilla y elenfermito. Abrí las puertas de la ambulancia y metimos al señor, ya estaba viejito. Estaba bien pálido. Ya iba a arrancar para ir al HU, cuando vi otra vez acercarse al jinete. Esperé a que pasara paradar vuelta en la calle y regresar. 
 Pero a unos metros de llegar a la ambulancia se detuvo. Yo bajé el vidrio de la ambulancia y le grite que se moviera porque tenía que llevar a un paciente. Esperóunos segundos y avanzó con su caballo. Cuando iba a emparejarse con la ambulancia se detuvo. Bajó la cabeza a la altura del vidrio y me miró. Si ya de por sí hacía frío, pareciera que la ambulancia secongeló.  
Sólo ví unos ojos negros, muy negros, y subí todo el vidrio. Intenté encender la ambulancia pero no daba marcha. Me dí cuenta que el señor enfermo se empezó a alterar, se movía raro,...