Leyes
A partir de 1760, tras el ascenso de Carlos III al trono, se tornaron más severos los ataques contra la iglesia, en particular contra la Compañía de Jesús, considerada como la orden religiosa másdesafiante no sólo por su cuantiosa riqueza y su poderosa influencia como educadora de los criollos, sino por su adhesión al Papa Clemente XIII, quien luchaba contra el regalismo en defensa de losderechos de la Santa Sede. En junio de 1767 el Gobierno español decretó de manera sorpresiva la expulsión de los jesuitas de todas las tierras bajo su dominio.
En la Nueva España se vieron afectados 700miembros de la orden; su arresto y posterior destierro ocurrió cuando la influencia jesuita se encontraba en su punto más alto, pues además de ejercer una influencia incuestionable sobre la élitecriolla, gozaban de un elevado prestigio entre otros sectores de la población novohispana. Una razón de ese prestigio era que la Compañía de Jesús había encabezado los esfuerzos que condujeron alreconocimiento papal del culto a la Virgen de Guadalupe.
El gobierno virreinal utilizó la fuerza del ejército recién creado para aprehender a los miembros de la Compañía y publicó una orden de destierro enla que se prevenía además cualquier intento de sublevación ante la medida.
Pese a la advertencia, en varias regiones del país, en particular en los actuales Estados de Michoacán, San Luis Potosí yGuanajuato, hubo rebeliones populares en contra de la expulsión de los jesuitas, que recrudecieron la animadversión de los mexicanos hacia las autoridades representantes del poder colonial. Esos actosde rebeldía fueron castigados con severas medidas represivas.
Pero sin duda el golpe más fuerte contra el poder de la iglesia fue la Real cédula sobre enajenación de bienes raíces y cobro de capitalesde capellanías y obras pías para la consolidación de vales reales, expedida el 26 de diciembre de 1804.
En virtud de este decreto, se extendía a todas las posesiones americanas la política...
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