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LA VOZ DE LA MINORÍA; UN DERECHO AL FIN RECONOCIDO.
“Si no podemos poner fin a nuestras diferencias, contribuyamos para que el mundo sea un lugar apto para ellas” – John F. Kennedy
Lahomosexualidad/bisexualidad y demás connotaciones del espectro de la sexualidad humana no son términos nuevos en el vocabulario mundial de uso cotidiano; estas conductas consisten en la atracción hacia personas delmismo sexo, o hacia ambos o en algunos casos, la tendencia a buscar pertenecer al género opuesto.
Pero ¿Es esta conducta una limitación a la hora de formar una familia y criar unos hijos como seresmoralmente estables y útiles dentro de la sociedad?
La respuesta claramente es no.
La familia, al igual que toda otra institución, es un producto social sujeto a modificaciones. Las relaciones humanasestán marcadas por la cultura en que se emplazan, por ello, las normas y leyes se modifican con el objetivo de acompañar dichos cambios culturales.
Se debe aclarar ciertos mitos y tabúes en torno a laadopción homosexual;
Primero, el temor a que los hijos de personas homosexuales sean homosexuales es un miedo infundado y carente de argumentos válidos; si la orientación sexual fuese un factorhereditario y dependiente del ambiente en que se crie la persona, teóricamente no deberían existir homosexuales, al ser todos hijos de parejas heterosexuales.
Segundo, Transmitiéndonos a otros ámbitosuna pareja homosexual por el mero hecho de su orientación sexual, no tiene porqué catalogarse como malos padres potenciales; puesto que si cumplen con los mismos requisitos de estabilidad económica yemocional de una pareja heterosexual, su orientación no los hace menos capaces de cuidar y criar a un infante.
Tercero, Una familia no es obligatoriamente fundada por un padre y una madre, un aspectoclave para tener en cuenta, muchas familias colombianas están conformadas por Madre-Abuela, Madre-Tía, por el hecho de que el padre o es difunto o simplemente evadió la responsabilidad, caso que...