libro de bachiller

Guille un chico de 18 años se encuentra desde hace cuatro meses hospitalizado. Está solo en este mundo lleno de injusticias, digo esto porque le ha tocado vivir lo peor que a una persona le podría pasar. A principios de verano le detectaron un cáncer en la próstata y su supervivencia no era muy esperanzadora.
Se dice que lo más importante para saber llevar una enfermedad de tal embergadura esmantener un estado anímico bueno, pero por si esto fuera poco, Guille no dejaba de pensar en la muerte y cada día le pedía más y más a dios su descanso eterno y poder reunirse con sus padres allá en el cielo. Pero Dios le tenía preparado un futuro muy diferente al que él se podría nunca inaginar.
Paula, tiene 17 años y estas vacaciones de navidad tiene que ir todos los dias al hospital a vivitar alos enfermos tal y como se comprometió junto a unas compañeras más si no aprobaban todas las asignaturas en este primer trimestre.
Paula cumpliendo su promesa fue el día de noche buena a conversar con lo que más solos se encontraban y fue entoces cuando se enteró de la tristeza que estaba padeciendo Guillermo. Inmediatamente fue a verlo.
- ¡Hola!, feliz navidad -exclamó Paula simpaticamente.
-Será para ti -respondió Guille groseramente- ¿Qué quieres? ¿vienes a inyectarme más medicinas? ¡No quiero, déjame en paz!.
- ¡No, no!, yo solo quiero hablar contigo...
- ¿Hablar? -interrumpió- ¿de qué?, llevo aquí postrado en esta cama cuatro meses, no se que hora es, ni en que día vivo. Todos los psicólogos vienen a aconsejarme que debo hacer para tener mejor ánimo pero ellos lo dicen porqueno están metidos en mi situación.
Tengo un cáncer en la prostata y pronto voi a morir, ¡y quieren que tenga buen ánimo!, cuando todos los chicos de mi edad están comprándose ropa para esta noche. ¿Qué quieres que te cuente? ¿Que mañana me vuelven a operar?.
- Lo siento mucho, -dijo Paula mientras le caía una lágrima por el rostro- yo no sabía por todo lo que estás pasando, pero podemos hablar yasí te desahogas, ¿Como te llamas?.
- Me llamo Guillermo, pero mis amigos me dicen Guille.
-¡Ah!, pues encantada yo soy Paula y estoy aquí porque hice un promesa... pero sabes lo que te digo, tu ahora mismo solo ves lo que te está pasando y no eres capaz de recapacitar y ponerte a pensar en salir adelante por ti y los tuyos.
- ¿los mios?, los mios están muertos.Todos fallecieron en un accidentede coche, mis padres y mi hermano mayor, accidente del que por desgracia me salvé y fue entoces haciendome pruebas me detectaron esta enfermedad que me está matando rapidamente.
- Lo siento, pero por muy duro que te parezca tienes que salir de este trance. Yo cuando más triste me encuentro me acuerdo de unas palabras que un día me dijo mi abuelo: "No hay nada imposible, porque los sueños de ayerson las esperanzas de hoy y pueden convertirse en realidad mañana".
- ¡Bonita frase para una joven estudiante que solo piensa en su futuro! -replicó Guille- pero yo ya no tengo futuro. Solo un pasado duro y un presente doloroso.
Paula cuando salió del hospital no dejó de pensar ni un momento en aquel chico que acababa de conocer y por cual había empezado a tener un sentimiento algo extraño.Aquella noche buena, Paula la pasó muy triste mientras Guillermo se preguntaba si volvería a ver a aquella chica de ojos verdes.
Al día siguiente, era navidad y Guille fue nuevamente intervenido y tras varios dias en observación, lo trasladaron de nuevo a planta. Paula, que había estado informandose de su estado, fue a verlo.
- ¡Guille!, ¿cómo te encuentras?.
- Bien supongo, ya por lo menos estoyaqui en la habitación donde tu puedes venir a verme -sonrió-. Me he estado acordando mucho de ti estos dias, he recapacitado lo que me dijiste y tienes razón, voy a luchar por mi vida y quiero que tu me ayudes y que estés presente en mi futuro.
- Por supuesto que lo haré, tenlo por seguro -dijo Paula muy contenta.
A partir de aquel día, Guille empezó las seciones de quimioterapia y mantuvo la...