Libro de literatura
E. GÓMEZ-VILLALBA J. A. MaLINA GÁLVEZ M. Pozo RODRÍGUEZ L. RODRÍGUEZ MEGÍAS
Facultad de Ciencias de la Educación Universidad de Granada
INTRODUCCIÓN
Los decretos andaluces 105 Y 106, de 9 de Junio de 1992, establecen las enseñanzas mínimas para la Educación Primaria y para la Educación SecundariaObligatoria. En el Área de Lengua Castellana y Literatura el aprendizaje de la lengua oral y de la lengua escrita ha de desarrollarse de forma interactiva y en un marco de construcción de significados, atendiendo a unos ejes esenciales: la función comunicativa de la lengua, la comprensión y la expresión, siempre dentro de un planteamiento constructivista en que el alumno debe ser agente y colaboraren su propio aprendizaje y con una concepción eminentemente funcional del lenguaje, en cuanto instrumento de comunicación y representación del mundo. Se trata, pues, del aprendizaje y enriquecimiento progresivo del lenguaje en el doble proceso de expresión y comprensión y de avanzar en la educación literaria y la reflexión sistemática sobre la lengua. La literatura infantil, como contenido delÁrea de Lengua y Literatura, denominada Lengua e iniciación a la Literatura en Educación Primaria, aparece vinculada estrechamente al desarrollo de competencias lingüísticas y comunicativas. El objetivo general se dirige a conseguir el dominio funcional de cuatro destrezas básicas: escuchar, hablar, leer y escribir; destrezas que cobran su significación siempre dentro de un texto, tanto oral comoescrito. Entre la diversidad de textos con que el niño ha de enfrentarse, el texto literario tiene especial relevancia. Se trata de emplear los textos de literatura infantil y cualquier otro texto literario, adecuados a las posibilidades del alumno, como recurso para desarrollar el proceso de madurez lingüística: estructuras léxicas, semánticas, discursivas, etc. Efectivamente, la Reforma haasignado algún espacio a la Literatura Infantil, pero de una manera implícita, tácita (Mendoza, 1992) ya que, al no tratarse de un contenido ni de un objetivo de aprendizaje, su presencia está diluida en las previsiones curriculares. Esto, unido a la peculiaridad de la materia, condiciona su presencia en la escuela: no se trata la Literatura Infantil de un objeto de estudio, sino de una materiamúltiple que supone el contacto y el disfrute de las manifestaciones literarias por vía intuitiva, afectiva o intelectiva, más tarde. Su particularidad reside en su propia capacidad de ofrecer múltiples respuestas a las necesidades infantiles, pero para ello sería necesario abordarla directamente, por sí misma, sin un tamiz instrumentalista que desvirtuara su esencia.
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El modelo tradicional deenseñanza de la literatura, como demuestra Colomer (1998), se halla sumido desde hace tiempo en una situación de crisis profunda e irreversible, cuya superación debe provenir de la reflexión educativa sobre los progresos teóricos producidos en las distintas ciencias implicadas en la enseñanza de la literatura, integrados con el análisis y valoración de los avances producidos en la prácticaescolar. Según Mendoza (1996) enseñar literatura es una ambigua expresión que debería ser sustituida por la de enseñar a apreciar la literatura, finalidad más acorde con el planteamiento cognitivo de los programas de aprendizaje y con la funcionalidad propia de la materia, de acuerdo con los actuales paradigmas educativos y de la crítica literaria (recepción, intertextualidad, enfoques semióticos,etc.). Para el niño y el joven en la enseñanza obligatoria la literatura no se presenta hoy día como un conjunto de contenidos que aprender sino como una serie de vivencias y experiencias con las que entrar en contacto, como un encuentro, como una actividad, más que como un objeto de estudio. Se plantea la necesidad de una educación Iiterada en la escuela básica que, desde el punto de vista de la...
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