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Kant considera que la voluntad moral es buena por si misma independientemente de los fines que alcanza o de los factores que puedan afectarla para bien o para mal. Nagel por su parte, hace notarque las personas juzgamos las acciones de otras personas por las consecuencias de estas además de que existen factores que influyen en nuestras acciones y están fuera de nuestro control.
Sin importarque tan buena o mala sea la voluntad de determinado acto, existen factores externos al sujeto que son los que afectan y pueden cambiar el juicio moral sobre la acción. Estos factores que afectan enúltima instancia el curso que toma la acción son denominados fortuna moral y esta puede ser buena o mala. Por ejemplo, una persona tiene la mala voluntad de aventar a otro individuo para que se caiga ysufra un daño pero al llevar a cabo esta acción lo salva de ser arrollado por un automóvil.
Pero con el anterior ejemplo decimos que la fortuna moral puede justificar cualquier acto por malo que estepretendiera ser en un principio, si juzgamos a una persona teniendo en cuenta la fortuna moral parece no ser culpable de nada ya que no tiene control alguno sobre ello.
Pareciera entonces quedeberíamos de valorar a las personas por su intención principal y no por la fortuna moral pero como hace notar Adam Smith “las consecuencias reales que resultan de cualquier acción tienen un efecto muygrande en nuestros sentimientos”. Desde un punto de vista kantiano los sentimientos e inclinaciones no tienen que tomar importancia ya que afectan la evaluación moral que hagamos o bien podríandeterminar nuestra voluntad. Por ejemplo una persona que es muy avariciosa y no quiere donar su dinero a la caridad pero aun así lo hace (según Kant la acción tiene un valor moral mayor que el de unapersona que sea muy caritativa) pero independientemente de esto considero que Kant toma en cuenta la fortuna moral en la acción para otorgarle un valor moral, y no solo a la voluntad, ya que dicha...