Libro
Un tema así, en lugar de buscarlo en los libros, es mejor encontrarlo en la experiencia de vida dentro el país. Las conmemoraciones del año pasado y su coberturaperiodística ofrecieron gran cantidad de información valiosa para hacer un balance sobre el legado de nuestra Independencia, porque fue recopilada entre grupos sociales heterogéneos y en las regiones másrepresentativas, sin incluir solamente a los especialistas.
Por principio de cuentas, la situación nacional nos hizo preguntarnos, antes de reflexionar sobre el significado del movimiento histórico, sihabía realmente algo que celebrar, pues gran parte de la población no se sentía llamada ni entusiasmada por la fiesta bicentenaria, agobiadas ante la evidencia, reiterada cada día, del aparente caosen el que se halla sumergido el país.
En las calles aparecieron leyendas que afirmaban que algunos no deseaban recordar y menos celebrar guerras y muertes, quizá porque existe una gran campaña que seopone a la llamada guerra contra el crimen organizado y la gente está harta de violencia y de todo lo que se le asemeje. Pero en ninguna celebración de la Independencia mexicana, como tampoco sucedeen otro país, se han conmemorado muertes o hechos violentos, sino el surgimiento de naciones independientes y la consolidación de identidades nacionales. De aquí que fuera necesario reiterar que lo quese iba a festejar era el “cumpleaños” de México y no los pormenores de su parto.
Mucho se habló también de que se trataba en realidad de una cortina de humo ante la ausencia de resultados positivospor parte de las autoridades en los diversos niveles de gobierno y la falta de un proyecto de nación: Pan y circo, que implicó un gasto excesivo en espectáculos efímeros y no en obras e institucionesperennes. Se hicieron pocas estatuas y monumentos conmemorativos, tanto a nivel local como federal, y el principal de ellos no fue terminado en la fecha prometida. Los libros de historia de México...
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