libroooooo Autoguardado

 Eran en esos tiempos de primavera en los que los sonidos de los pájaros en la madrugada de agosto, se recostaban en las ventanas de la habitación de Madeleine Moblad, mientras ella envuelta entre sus sabanas extrañaba el olor peculiar de las playas de Seattle. Cada día que pasaba oscurecía su corazón. Ahora Parte de su cuerpo pertenece a Port Orchard, y aunque su alma siga en su pasado, eltemor de acostumbrarse a esta nueva vida lejos de casa la atemorizaba.
Sus padres Richard Moblad y Zara Style estaban convencidos de que era lo mejor para su estabilidad social. Madeleine no era una chica común ella desarrollaba habilidades psíquicas con cualquier objeto que su cuerpo tocara; era así como sabía que el profesor de matemática había estado tomando café antes de entrar clase consolo tocar su taza o cuando tocaba la chaqueta morada de su mejor amiga britney y a través de esta veía donde esta había estado antes.
Pero a la larga del tiempo sus habilidades se convirtieron en un gran problema ya que a veces sin darse cuenta se enteraba de cosas que no hubiese querido saber.
Madeleine conocida como la chica Moblad tenía el cabello liso como un terciopelo y marróncomo el café; sus ojos color miel transmitían una mirada penetrante y apasionada que embellecían parte de su cara, era una chica fuerte, pero delicada, con piel blanca como la espuma del mar. Siempre vestida con colores vivos y botas altas. Heredando el mal genio de su padre y la sabiduría de su madre, dos doctores estadounidenses con mucho parecido.
Al amanecer del día lunes, comenzaba suprimer día en la Universidad de Seattle (Seattle University) los nervios se apoderaban de su mente, pero ella tan rígida como siempre trataba de no demostrarlo. Pocos minutos antes de sonar la campana, la chica moblad se dirigía hacia los casilleros buscando el número 12. Sin darse cuenta en la esquina del pasillo estaba un chico de gran parecido, alto con un color de piel morena y brillantes ojosclaros quien la observaba mientras sonreía desde lejos.
_Mucho gusto mi nombre es Abraham souther, ¿Eres la chica nueva?
_Un placer mi nombre es Madeleine Moblad. ¡Si ingrese aquí hoy!
_ ¿Estas perdida? Puedo ayudarte, déjame ver tu horario _ ¡Excelente! , ves Ingles gales conmigo en la sección C.
_ ¡En serio!, que brillante. < Despues de 2 meses el intento de ser una chica normal se desprendía de ella de una manera natural. Parecía que cada mirada entrelazada con Souther cambiaba su manera de pensar.
Esa mañana al llegar a casa le sorprendió el no ver a sus padres, era habitual ver a su madre cocinando panqueques y a su padre leyendo un poco el periódico del día en el sofá azul que estaba al frente desu pequeño y antiguo televisor. Tomo un vaso de agua y se dirigió a su cuarto a escuchar un poco de música, pero el repique de su celular descontroló su concentración.

_ ¡Britney!.
_ ¡Madeleine!... Abre tu puerta te tengo una sorpresa que te espera afuera.
Bajó por las escaleras de maderas que crujían mientras sonaban a abrir la puerta que se encontraba en la parte trasera del patio.
_¡Britney, estas aquí! Viniste a verme, me hacías mucha falta, ya se me había olvídalo tus malos gustos >> Las risas complementaron el silencio que se escondía en la pequeña sala<<
_Claro que vine a verte tu vocecita chillona y malcriada ya me hacía mucha falta
Mientras pasaban las horas el peculiar nombre de Abraham se sumergió a la conversación, mientras esperaban, que Zara y Richard llegaran acasa. Sus miradas poco a poco comenzaban a cansarse hasta quedar dormidas.
A la mañana siguiente el despertador retumba en los sensibles oídos de Moblad apuntando las 6:00am hora perfecta para comenzar el día. Al mirar alrededor se da cuenta que aún no había nadie casa, pero no tenía tiempo para preocuparse por ello, el examen de Ingles comenzaba en una hora.
_ llegas tarde _ Dice Abraham...

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