lic. psicologia
La violencia de género va dejando de ser un tema tabú. Se ha empezado a reconocer como fenómeno presente y a tratarse esporádicamente enlos medios de comunicación, pero la práctica confirma que viejas creencias y prejuicios siguen naturalizando su existencia.
Frases y creencias muchas veces repetidas como "a ella le gusta que lapeguen", "se lo buscó" o "es una pelea de pareja, de ahí no pasan" perviven en la vida cotidiana, continúan limitando la violencia a un asunto del ámbito doméstico o privado y alejan la intervenciónnecesaria para impedir males mayores, desenlaces fatales, la continuidad del maltrato, el apoyo y la asistencia a las víctimas.
Un estudio realizado en 2006 por el Grupo de Estudios sobre Familia delCentro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas (CIPS) comprobó, tras entrevistar a 564 personas, que cierta mayoría tenía "claridad" acerca de lo que es el maltrato en la familia y carecía demitos que lo justificaran.
Sin embargo, el mayor acuerdo del grupo frente a varias frases lo alcanzó la idea de que "las víctimas del maltrato a veces se lo buscan; hacen cosas para provocarlo"."Esta creencia, muy generalizada universalmente, resta responsabilidad al victimario y ha constituido un mito que justifica las formas más fuertes de violencia: desde la joven que es violadasexualmente porque "iba vestida de forma provocativa" o la esposa -o niño/a- con huesos fracturados porque "no respetó al marido o padre".
"Aunque numéricamente resulte alentador que una mayoría nodefienda mitos universales, se debe considerar que son excepcionales los sujetos que no tienen incorporado alguno de estos estereotipos sobre la violencia", apunta el resumen de investigación.
Personasdedicadas al estudio de la violencia llaman la atención acerca de que los mitos, la falta de información y el desconocimiento en torno a este problema social siguen frenando su identificación y...
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