Licenciado En Comunicación Social

Resulta inaceptable que nadie se acuerde de las viudas y huérfanos, y es muy doloroso no ver una respuesta, y ni siquiera una atención para ellos que perdieron al sostén de lafamilia y al protector de su integridad física.



En cambio, los gobernantes, sólo están preocupan por su seguridad personal, empleando al Ejército, o pagándoles a policías, paraque los protejan.



Tenemos un “Gobierno del Cambio”, que no ha cambiado mucho que digamos, que no hace mucho, o hace muy poco, para implementar programas que subsanen losefectos perjudiciales que la batalla contra el crimen organizado ha dejado en familias enteras, comunidades, poblados, sus jóvenes y niños que allí viven.



Ellos han quedadoen el desamparo, son decenas de mujeres y niños abandonados, que necesitan de un apoyo financiero que les garantice su alimentación, salud, educación, y empleo.



Ya al menos,por ética y moralidad gubernamental, deben voltear a ver a los afectados y desvalidos, por la guerra fratricida contra el narco, para brindarles su ayuda y apoyo.Retribuirles lo que perdieron; el sacrificio del esposo y del padre que era el sustento y brindaba tranquilidad a la familia.



De ese hombre que murió para proteger a la sociedad engeneral, es justo retribuirles, a sus seres queridos, todo el apoyo para sus necesidades de subsistencia.



De hecho, ya a nivel nacional, el Congreso de la Unión aprobó unpunto de acuerdo para solicitar al gobierno federal programas de atención a los huérfanos de la guerra contra el narcotráfico, y eso lo queremos hacer válido también aquí, en Sinaloa.Por lo que a nivel local, solicitamos que el gobierno del estado implemente programas de becas, trabajo, y subsidio, para huérfanos de la guerra contra el crimen organizado.