licenciado en escultura

Hoy, ¿se puede “enseñar” a Dibujar? *

Tratare de ensayar una respuesta a esta pregunta en la presunción de que para los Docentes de las Escuelas de Arte de generaciones anteriores no solo “sí” se podía, sino que “se debía enseñar a dibujar”, advirtiendo sobre la necesaria adquisición de destrezas en el Dibujo, dado que esta disciplina, en tanto eje o basamento formal,resultaba clave para poder concretar a su alrededor, -y quizás vasallamente-, los demás géneros artísticos. El Dibujo “Clásico” es aquel que demuestra fehacientemente los valores táctiles, la forma cerrada, los claros oscuros subordinados a la forma, la línea como sustento absoluto y concreto de todas estas cualidades plásticas; es decir un “ethos” u ordenamiento racional de aquello que sepercibía -el modelo- y a lo que se le adjudicaba la certeza de la realidad. Esta práctica plástica se constituyo en Europa, desde el Quatrocento hasta el siglo veinte, en el alma rectora y prescriptiva de la enseñanza del Dibujo. Pero esta operativa tenía un presupuesto sólido en la historia de Occidente. Desde el concepto griego de Belleza, en tanto equilibrio y armonía, se entiende a ésta comouna especie de absoluto impersonal al que se debía propender, que constituye la esencia misma del Ser y que, en la realización arquitectónica y escultórica exponía sus máximas realizaciones. Tan impersonal y potente la plástica Griega hace decir a Hegel , en su visión de aquel período de la historia de la cultura, que en el arte Clásico “no debe revelarse ninguna predilección particular de lapasión, del placer, de los deseos por los caprichos y la fantasía”. En Grecia, del período clásico, las artes visuales estaban consideradas “techné” (técnicas) que implicaban un “saber hacer” o sea un conocimiento –el saber- de las reglas que rigen la práctica -el hacer-, sin atención a la fantasía individual o lo múltiple cambiante, pues la subjetividad no se podía acorcetar en normativas“claras”. Pero es en la Modernidad donde los artistas se liberan del “estigma” de la destreza y proponen al arte como un camino de conocimiento (intelectual), que luego tendrán que resignar a la ciencia, campo eminentemente racional que se auto consagrará como único terreno de la Verdad (la ciencia, cuyo modelo físico matemático se calcifica en el Positivismo, también será deudora del ideal Clásico entanto pretensión de “universalidad” o búsqueda de un Método único de cobertura legal, etc.). No obstante las prácticas artísticas se constituyen –en el siglo XIX - como campo autónomo diferenciado de las demás esferas de conocimiento, apuntando a una mayor reflexión técnica y filosófica y, desde su terreno autónomo, se involucran –o las involucrarán- en ámbitos tales como el de laHistoria, la Política y aún la Ciencia ( recordemos el articulo “la ciencia como Arte” de Paul Feyerabend , en donde, siguiendo la interpretación de Sonia Vicente, “el autor cuestiona la supuesta superioridad del saber científico sobre otras formas de conocimiento y abre las posibilidades de un acercamiento entre arte y ciencia” -libro “Adiós a la Razón” – Feyerabend, Paul citado en el artículo “Arte yCiencia - Reflexiones en torno a sus relaciones”. Vicente, Sonia). Luego de las diferentes tribulaciones, crisis y catástrofes, es decir, la Historia de la Representación , tema que nos convoca en esta charla, hoy, a comienzos del siglo XXI y a caballo de un percibido “cambio época” que se yergue como anti lustración para algunos o complitud de la Modernidad para otros ¿podemos “enseñar aDibujar”? O mas bien , como se cuestiona Juan José Gómez Molina, “qué se dibuja y porqué se dibuja” (“Estrategias del Dibujo en el Arte contemporáneo” - Juan José Gomez Molina). Hoy estamos lejos de los tutores prescriptivos de la regla y el Canon, de las recetas escolásticas medievales, del autoritario juicio de la Antigua Academia, del mirar condicionado del público inclinando el gusto hacia...