Licenciado

Leer y comprender textos académicos. Un acercamiento
posible a la cuestión1


Gustavo Giménez
Facultad de Filosofía y Humanidades

Un problema complejo
Muchas disciplinas vinculadas directa o indirectamente a las ciencias del lenguaje (la psicología cognitiva, la psicolingüística, la lingüística de la escritura, etc.; aunque también la sociología, la antropología y la etnografía entreotras) han difundido en los últimos años una serie de conocimientos que permiten saber hoy más que nunca sobre los complejos procesos individuales y colectivos implicados en la interpretación y/o comprensión de textos, en la adquisición del lenguaje escrito y en la composición de discursos escritos; cada vez más información sobre teorías e investigaciones circula en los medios académicos y seexpone en la bibliografía pedagógica para maestros y profesores de distintos ciclos o niveles. 
A pesar de ello, cada vez más se expande la sensación de que estamos en el momento más crítico de la educación porque cada vez más alumnos abandonan la escuela con habilidades demasiado pobres y escasas para analizar y producir textos escritos y, en consecuencia, para poder ingresar a cursos universitariosregulares y mantenerse en ellos, o para tener acceso a empleos.
Pareciera ya formar parte del sentido común, que los niños y jóvenes no interpretan bien lo que leen, que no saben escribir o lo hacen muy mal, y que dichas competencias no los favorecen para ingresar al complejo mundo del trabajo o del conocimiento. La educación y las instituciones educativas -aún las de nivel superior- sonpermanentemente objetos de innumerables críticas y sospechas, que cuestionan la legitimidad de los contenidos que imparten y los aprendizajes que promueven.
La pregunta acerca de cómo torcer ese fatal designio gana cada vez más terreno en los circuitos superiores de la educación y se instala paulatinamente como un problema prioritario también en la actividad cotidiana de los profesores terciarios ouniversitarios.
El problema, sin embargo, reviste tal magnitud que la esperanza de hallar un “método” o una serie de “estrategias” que puedan revertir la situación en el corto plazo no deja de parecer imposible o, en un cierto punto, ingenuo. La cuestión de la comprensión y la producción de textos es básicamente un fenómeno cultural que se referencia en los complejos mecanismos sociales delegitimación, consumo, y distribución del saber y sus productos discursivos. Quién accede a determinados productos de la cultura (los textos escritos que se utilizan en las academias, por ejemplo), cómo lo hace y cómo valora esa práctica, son algunas de una serie de preguntas claves cuyas respuestas podrían ayudar a entender la compleja relación entre sujetos sociales lectores y no lectores, escritores yno escritores.
En el ámbito de la escuela, la fragmentación social y cultural cuestiona cada vez más la imaginaria correspondencia entre los significados que los profesores y los estudiantes otorgan a las actividades de leer y escribir textos. Los textos que leen y escriben cada uno, la forma en que lo hacen y el sentido que le otorgan, hacen muchas veces irreconciliables el mundo de la escuelacon el de las prácticas culturales cotidianas. Cada vez parecen resultar más extraños a más jóvenes lo que dicen y la forma en que lo hacen, esos textos que circulan en las escuelas o las academias para explicar y describir los fenómenos del mundo natural o social. Quiénes leen y escriben, cómo lo hacen y para qué, son interrogantes que no pueden dejar de plantearse en un marco cultural más ampliosignado por la desigualdad de recorridos, posiciones y expectativas en la vida social.


Una propuesta
Lo dicho hasta aquí no intenta ser un gesto desesperanzado ni inmovilizador; antes que nada, una señal de la necesaria cautela teórica y metodológica que amerita la complejidad del problema y de la necesidad de pensar que las mejores estrategias que podamos ingeniar para enfrentar la...