licenciado

El jubileo del pueblo de Israel que nos habla el libro sagrado, era un año de gracia del señor, como escuchamos; no se sembraba, se comía de lo que la tierra daba espontáneamente, la tierra descansaba, y quienes la habían perdido la recuperaban, se perdonaban, se liberaban los esclavos, se reconciliaban los enemigos; con todo era imagen y figura, sombra y anuncio de lo que vendría después, conJesucristo el Señor se inaugura el verdadero jubileo, que no es un año convencional, no son 365 días, es un tiempo de gracia y de bendición del Señor, es el tiempo de la salvación, es el tiempo del mesianismo anunciado por el profeta Isaías y que Jesús en la sinagoga afirma como realizado, cumplido. Cuando se cumplió la plenitud de los tiempos; dice San Pablo, Dios envió a su Hijo nacido de mujer.La Iglesia nuevo Israel, nuevo Pueblo de Dios, asume la tradición judía y nos invita también a celebrar el jubileo, el año de gracia como medio pedagógico para llevarnos a una fe más madura y aun compromiso cristiano más serio firme y coherente; el mensaje de Jesús para nosotros, la fe que tenemos hunde sus raíces en la gestas evangelizadoras de la conquista y la colonización de nuestros pueblospor los españoles, toda nuestra arquitectura espiritual la debemos al obispo de Quito y a las comunidades religiosas de la misma ciudad que desbordadose por pendientes y rincones, llanuras y páramos, ríos y lagunas catequisaron a los indios, amaestraron a los españoles, dieron ejemplo a españoles y a indios, robaron apaciblemente a satanás sus tesoros, y apaciblemente sembraron en la melancolíaasustada de las cordilleras el grano de mostaza Evangélica que la mano de Dios elevo al cielo y que el corazón de Jesucristo lleno de amor y de pájaros… dice monseñor Justino Mejía y Mejía en su libro “Pasto, pastores y pastorales”.
Los misioneros a mas de la fe nos trajeron cultura, fundaron pueblos, hicieron caminos, fundaron hospitales y escuelas, colegios, defendieron a los indígenas de losatropellos de los españoles, levantaron templos, vinieron para quedarse; algunos fundaron sus comunidades que florecieron en virtud y en numero que perduraron has ahora; la Virgen estaba con ellos, como discípula y misionera de su Hijo, ha estado siempre presente en la historia de los pueblos, Ella se manifestó especialmente en Ipiales, en la rivera del guaitara; es la Virgen Lajeña, si imagengrabada en la piedra aparecida a María Mueses de Quiñones en el año de 1754 quien a sus pies arrodillados a Santo Domingo y a San Francisco cuyos seguidores fueron los primeros misioneros de nuestro territorio, poco a poco fueron naciendo las Diócesis en el territorio de aquel entonces la Nueva Granada; Santa Marta, Popayán, Santa Fe de Antioquia, Santa Fe de Bogotá, Cartagena, y en el año de 1846Pasto, Ipiales en el año de 1964, hoy Colombia tiene 77 Diócesis o circunscripciones eclesiásticas.
Nuestra Diócesis de Ipiales creada por el Papa Pablo VI el 23 de septiembre de 1964, mientras trascurría la celebración del Concilio Vaticano II, cumple hoy sus 50 años de vida, sus bodas de oro; 1964 – 2014. Esta historia cincuentenaria ha tenido a mi modo de ver dos periodos bien claros ydefinidos; el primer periodo de 1964 a 1985 marcado por el pastoreo de monseñor Arteaga Yepes sucesor de monseñor Miguel Ángel Arce vivas, primer obispo y cuyo paso por la diócesis fue muy fugaz de apenas escasos 5 meses, pues rápidamente fue trasladado a la sede de Popayán como arzobispo; monseñor Arteaga Yepes de origen antioqueño, de alma misionera, de espíritu emprendedor vino de Popayan dondeejercia como obispo auxiliar, le correspondio organizar los servicios de la curia diocesana, fundo el seminario, impulso las vocaiones, busco sacerdotes, pues los que quedaron pertenenciendo a la nueva diócesis no eran suficientes, hizo visitas pastorales y recorrio en carro y a lomo de mula, y a pie carreteras y caminos, pueblos y veredas; “yo voy allá donde los sacerdotes no van” decía, le gustaba...