Licenciatura En Leyes

Empecemos por aclarar que un soberano no renuncia sino que abdica. Pero esta pequeña confusión semántica, por ignorancia, es harina de otro costal. Todos los días después de afeitarme y hacergimnasia, acostumbro a oír un resumen de noticias a las 6 a.m., y allí oí, sin más comentarios, que el Papa había renunciado. Sabedor de la ideología de los dueños de la emisora, me pareció apenas naturalque a ese acontecimiento le dieran un tratamiento marginal. A mi mujer le conté y ante sus ojos muy abiertos e interrogantes, agregué:–Vámonos preparando para la avalancha de especulaciones e inventos,bien o mal intencionados, pues soy consciente de la angustia con que se levantan cada mañana miles, decenas de miles de periodistas para poder satisfacer a sus medios y justificar su sueldo.Misexpectativas se quedaron cortas, pues yo no había sido testigo durante mis ya largos años de vida de una explotación tan eficiente de semejante filón de oro. Lo que yo intuí iba a ser mortificante, seconvirtió en un divertidísimo jolgorio. ¡Lástima que un pontífice no renuncie cada año!, para poderme reír con ganas - me decía - o comprobar el enorme talento de la gente para la inventiva. Dice el viejorefrán que “el ladrón juzga por su condición”, y ello se traslada a los pueblos.Yulissa . 12 18 11 15 holy: 13 14 16 17 19 20o curioso  fue que el mismo día después de anunciar Benedicto XVI sudimisión un rayo golpeó  la cúpula de la Basílica de San Pedro en el Vaticano desatándose una ola de rumores  sobre una señal de descontento que estaría mandando Dios o  insinuando la posibilidad de unaconspiración utilizando el Proyecto norteamericano H.A.R.P. (High Frequency  Active Auroral  Research Program – Sistema para Modificar y Controlar el Clima, Tiempo e Ionosfera). Aparte de todas lasideas que siempre ofrece la teoría de la conspiración, la posibilidad de la renuncia ya fue anticipada por el pontífice en una entrevista que fue concedida a un periodista católico alemán, Peter...