literatura

Literatura Norteamericana


Primer Parcial












Tanto El joven Goodman Brown de Nathaniel Hawthorne, como Chikamauga de Ambrose Bierce y El continuo de Gernsback de William Gibson pueden leerse como “pesadillas” del Sueño Americano.
Es pertinente, en principio, acercarnos a una definición de lo que se conoce como “Sueño Americano”. Podemos decir que este es elconstructo que da origen a la cultura y el comportamiento de la nación norteamericana (Harry Levin lo define como una “ideología”1), cuyos dos polos, el individuo y la sociedad, entran en conflicto en ocasiones cuando sus intereses se superponen.
Por otra parte, también debemos destacar dos etapas esenciales en la construcción del Sueño Americano: la primera, se centra durante el poblamiento deNueva Inglaterra y se ve claramente ligada a conceptos religiosos. El Nuevo Mundo puede considerarse como un mito idílico de aquella época ya que representaba “un nuevo Jardín de Edén”2, donde el hombre podía tener un nuevo comienzo en contacto con lo natural, dejando atrás “la pobreza, las guerras y la opresión” que tenían lugar en el viejo, gastado y corrompido continente europeo. La segundaetapa está fuertemente ligada al concepto renacentista de felicidad terrenal y tiene lugar luego de la Guerra de Secesión (1860-1865). El Sueño Americano toma una nueva configuración gracias a la empresa capitalista: el ideal del agricultor autosuficiente y feliz que encuentra su riqueza en la tierra es reemplazado por el sueño masivo del trabajador proletario que busca convertirse en un magnate.La literatura norteamericana, recoge tanto las visiones positivas del Sueño así como las desilusiones que el mismo provocó.
En el siglo XVIII, la crítica neoclásica condenaba a la ficción por alejarse de las reglas de imitación y consideraban a la imaginación como una influencia corruptora de la moral de los lectores. Las novelas eran consideradas una imitación de la naturaleza y de la buenasociedad, mientras que los romances no se consideraban como instructores del mundo real y la virtud. Sin quererlo, estos críticos reconocieron la poderosa educación social en los efectos de la ficción, volviéndose esta ideológica.
En su ensayo El poder de la negrura, Harry Levin se refiere al Sueño Americano como “la enunciación de una verdad a medias”, donde solo “las mentes más perceptivas”se concentraron en “la mitad oscura de la situación”, cuya “actitud distintiva” ha sido mediante “la introspección, el disenso o la ironía”.
Es claro que una de las mentes a las que se refirió Levin fue Nathaniel Hawthorne, cuya ficción se ubicó dentro del romance. Dice Fred Botting sobre este autor: “desmitifica las representaciones góticas de un pasado que acecha y las supersticiones asociadascon este que se propagan en el presente para focalizar el juego de luces y sombras presentes en la familia y la sociedad”.3 En El joven Goodman Brown, podemos apreciar un viaje interior del personaje principal que culmina con la pérdida de su fe y con el conocimiento de la naturaleza maligna del hombre; en este texto podemos discernir una crítica a la doble moral del Puritanismo.
Se narra unviaje a través del bosque que puede ser interpretado como la transformación del hombre al tener contacto con la naturaleza salvaje (concepto de Wilderness gótico); cuánto más se acerca Goodman al centro del bosque, más cerca está de tener la revelación del Mal, es un viaje psicológico que lo lleva a descubrir su propio costado oscuro, tal como lo expresa el dueño del bastón con forma de serpiente:“el maligno es menos espantoso que cuando rabia en el pecho de un hombre”4. Como resultado, se concientiza acerca de la vida pecaminosa de su comunidad y hasta pierde la confianza en su esposa, quien simboliza – como lo insinúa su nombre – su fe, perdiendo así también la fe en la humanidad, lo que lo llevará a vivir penosamente y a una muerte solitaria.
Este es un cuento fantástico y ambiguo...