Lituma en los andes
Ciertas indagaciones llevarán a Lituma con un danés enamorado de lacultura peruana, Escarlatina quien le abre los ojos respecto a la desaparición de estos tres personajes. Escarlatina le habla de las costumbres milenarias de los antiguos peruanos quienes sacrificaban a sus víctimas a la montaña para que ésta y quienes viven en ella pudieran librarse de algún hecho fatal, o bien, para ganarse el favor de los espírutus que habitan en ellas, costumbres y creenciasque ni siquiera la influencia judeo-cristiana pudieron desterrar y que permaneció de manera profusa en las creencias diarias de la gente indígena. Este sincretismo se manifiesta en celebraciones orgíasticas y dionisiacas que son la pura exaltación del gozo donde "se visita al animal", la gente se pone en contacto con su parte instintiva y salvaje por medio de cantos y bailes acompañados de piscoque es una bebida a base de uva, o bien con la chicha. Los danzantes entrarían en estado de transe en comunión con los espiritus. Todo ello conviviendo con la devoción católica enemiga del cuerpo y anti hedonista.
Lituma en los Andes cuenta la historia del cabo piurano Lituma, quien, junto con su compañero, el guardia cuzqueño Tomás Carreño, llamado también “Tomasito” o "Carreñito" (ambospertenecientes a la Guardia Civil), es destinado para servir en un puesto olvidado en Naccos, un pueblito de la sierra central del Perú, en medio de la guerra desatada por el grupo terrorista Sendero Luminoso. Allí se dedican a investigar la misteriosa desaparición de tres personas: el mudito Pedro Tinoco, el albino Casimiro Huarcaya y el capataz de la obra de carretera, Demetrio Chanca (cuyo verdaderonombre y identidad, como después se supo, era Medardo Llantac, alcalde de Andamarca). Esta investigación la realizan bajo la amenaza constante de los senderistas (autodenominados “guerrilleros”), quienes tratan de oponerse al sistema y al gobierno por medios extremadamente violentos y crueles. Las pesquisas sacan a la luz extrañas y lúgubres leyendas andinas en torno al llamado pishtaco, especiesingular de asesino que extrae la grasa a los hombres y practica canibalismo, y a quien se le acusa de las desapariciones. Sin embargo, Lituma se muestra escéptico y conjetura que los senderistas son los responsables de dichas desapariciones. Pero uno de los barreneros o peones de la carretera confiesa finalmente que los tres desaparecidos habían sido sacrificados a los apus, las deidades...
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