En 1965 aparece la obra llamada Lo imprescriptible, lo que no se puede prescribir, un texto que no se puede dejar pasar, es irrodeable, que pone como imperativocategórico la imprescriptibilidad de los crímenes contra la humanidad, es a propósito de los crímenes nazis durante la segunda Guerra Mundial, esos crímenes metafísicos, esoscrímenes ontológicos, que buscan suprimir al otro en su ser. Jankélevitch se quiere garante de la memoria de aquellos que ya no están aquí para defenderse, los muertos. Estetexto atestigua del misterio del sufrimiento, su análisis sobre la austeridad y la vida moral, lo puro y lo impuro, la aventura, el aburrimiento y la seriedad, todos esosson títulos de libros, sus análisis se centran sobre un punto preciso: “hay que hacer el bien, y yo soy quien lo debe hacer, me incumbe participar en el surgimiento de laverdad en la aventura humana”.
Y en su polémico texto prolongado, Lo imprescriptible, planteará sin contemplaciones que nunca podrá cancelarse el genocidio que hamarcado psicológica y culturalmente la década final del siglo XX
En L’ imprescriptible, publicado en 1971, Vladimir Jankélévitch concebía el perdón como una suerte de truequeo intercambio con el arrepentimiento: donde no hubo arrepentimiento, no hubo castigo. Y donde no hubo castigo, no puede haber perdón. Desde el momento en que ya no sepuede castigar al criminal, uno se encuentra con lo irreparable, aquello para lo cual ya no hay expiación posible. Y de lo imposible de expiar, de lo irreparable,Jankélévitch deduce la noción de lo imperdonable, de aquello que no tiene perdón. Y de allí concluía que es imposible perdonar lo imperdonable. Lo imperdonable no se perdona.
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