Lo Siento
Es un día como los demás. Te levantas porque tienes que hacerlo, claro está, pese a ese dolor de espalda que desde ayer te está matando. Llevas más de veinte minutos reflexionando unaidea que te provoca un escalofrío que te paraliza el cuerpo. Por que tú, a diferencia de las demás personas, no puedes llamarle a tu jefe para pedirle permiso de ausentarte por este día, para poderrecuperarte un poco. Incluso te parece ridículo sólo pensarlo, ya que si no vas tu familia hoy no come.
Y esa familia es la que te hace que el día a día no pase sólo como el infierno que te abrumadurante la mayor parte de tu vida, con ese sufrimiento que te devasta cuando los ves con un sinfín de carencias que no puedes evitarles, ya que como tu bien sabes, ellos merecen mucho más de lo que erescapaz de proporcionarles. Sin embargo, aun con todos lo esfuerzos que realizas para intentar salir un poco adelante, siempre resulta infructuoso. Tus capacidades no pueden ir más allá de lo querealizas en tu trabajo, y en caso de pensar en buscar otro trabajo, es una idea vaga y lejana, ya que con tus estudios no lograrás que nadie te ofrezca más que otro puesto como albañil. La impotencia quesientes al pensar en esta situación que afrontas llega a tal límite que comúnmente no encuentras mejor remedio que ir a curar tus penas con alcohol.
Por que él es para ti como un gran amigo, porqueal estar con él nunca te hace recordar la miserable situación en que te encuentras, y siempre te hace disfrutar del momento. No te das cuentas de que un verdadero amigo te ayuda a buscar la solución yno evita el problema, y no te daña como el alcohol lo está haciendo contigo. Y el peor de los casos es el daño que propicia le ocasiones a tu familia, principalmente a esa paciente y excelente mujerque tienes por esposa. Sí, a esa persona a la que al llegar completamente alcoholizado a tu casa no te tientas el corazón ni se te remuerde la conciencia al tratarla y golpearla sin escrúpulo...
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