Locarno

LOS ACUERDOS DE LOCARNO

Locarno es una pequeña población del cantón suizo de Tesino, situada en la orilla Norte del lago Mayor y, por tanto, a muy pocos kilómetros de la frontera italiana. Por allí anduvo Aníbal zurrando a los romanos, hace más de dos mil años. Luego, ya en la Edad Media, llegaron de Milán unos gibelinos, los Visconti, con sus intrigas, sus luchas, sus puñales y susvenenos, y construyeron un espléndido castillo; y más tarde aún, en 1569, llegaron unos benedictinos y, sobre la pequeña colina a cuyos pies se extiende la ciudad, levantaron el monasterio de la Madonna del Sasso, que en octubre de 1925 albergaba inquilinos muy notables. Estaban en él los representantes de Alemania, Stresemann; de Francia, Briand; de Italia, Mussolini; de Gran Bretaña, Chamberlain; deBélgica, Van der Velde; de Polonia, Skrzynski, y de Checoeslavaquia, Benes. El objeto de la reunión era resolver las cuestiones fronterizas entre Alemania por un lado, y Bélgica, Francia, Checoeslovaquia y Polonia por otro. Inglaterra e Italia garantizarían los acuerdos.
Europa aún no se había recuperado de la guerra del 14. Los alemanes, que desde aquel punto y hora venían sufriendo crecientesprivaciones, estaban aún más ansiosos que los vencedores por volver a la normalidad. Después de la derrota, de la humillación de Versalles, de la terrible factura de las reparaciones de guerra y del durísimo invierno de los nabos de 1921, vino el delirio monetario de 1923: una increíble inflación (quizá buscada de intento por Alemania para convertirse en insolvente) llevó a la bancarrota a larecién nacida República de Weimar. Un dólar, que en 1921 valía 4 marcos, costaba 20.000 en enero de 1923; en junio, 100.000; en agosto, 5 millones, y en septiembre 50. En noviembre, las alucinaciones monetarias alcanzaron cimas nunca vistas: (630 millones de marcos por un dólar! Para comprar un huevo era precisa una montaña de papel moneda, y apareció el comercio de trueque: la economía volvía a laEdad Media. Alemania, en quiebra total, no podía pagar.
Pero las secuelas económicas de la guerra y la destrucción habían afectado a todos, vence-dores y vencidos. Francia quería cobrar. Alemania (dijeron con las pruebas en la mano( no había entregado el carbón y la madera pactados. "Para garantizar el cumplimiento de las obligaciones alemanas" Francia ocupó militarmente la cuenca del Ruhr, consus riquísimos yacimientos carboníferos. Era la vuelta al uso de la fuerza como razón suprema; y en aquella Europa harta de bayonetas, Francia fue motejada, incluso por sus aliados, de torpe, temeraria, egoísta y fanfarrona. Los vencedores, un poco tarde, comprendieron que ningún país podía salvarse por sí solo; que la estabilización del marco era la vía para la confianza del inversionista,alemán o extranjero, y el paso previo para el relanzamiento de la economía germana.
El autor del aquel primer milagro alemán fue el canciller Stresemann. Creó una nueva mo-neda, el rentenmark (luego reichmark) y obtuvo un préstamo de ochocientos millones de mar- cos-oro para rehacer el país. Las obras públicas se pudieron reanudar, la industria dio un salto, descendió el paro y los precios secontuvieron. Tan favorables indicios y la tradicional fe en la Alemania seria y laboriosa atrajeron capitales, y comenzó una etapa de prosperidad.
Para lograr el préstamo, Stresemann tuvo que someter a control aliado todos los ingresos del Estado (aduanas, impuestos, ferrocarriles, etc.). Y lo que es más importante, tuvo que tranquilizar a Francia. Francia buscaba sobre todo su seguridad, tantasveces amenazada por Alemania a lo largo de la Historia. Si Francia pudiera sentirse segura (por medios que Alemania pudiera con-siderar aceptables) su conducta hacia Alemania se haría más tolerante y podría admitir la recu-peración económica, e incluso militar, alemana. Había que lograr un acuerdo claramente defini- do sobre la inestable situación de la frontera. Los franceses se marcharían del...