Locos

¿Cómo podré estar triste...?

En los tiempos de Hudson Taylor, China era un país totalmente cerrado. Había solamente cinco puertos y los extranjeros solo podía vivir allí. Las leyes no permitían entrar al interior del país. Sin embargo, y por la gracia de Dios, Hudson logró ser el primer misionero que llevó el evangelio al interior del país, miles y millones de kilómetros, cientos y cientos deciudades, millones y millones de chinos, fueron alcanzados por la Palabra de Dios. En medio de tal maravilla, sufrió penalidades personales difíciles de sobrellevar, la muerte de su esposa de 33 años cuando él tenía solo 38 y también de varios de sus hijos; sufrió su propia enfermedad estando meses sin poder levantarse, mientras la obra lo reclamaba. A pesar de todo ello vivió una vida de gozo ymuchos de aquellos que lo conocieron y compartieron con él dan testimonio de que ese era el secreto espiritual de Hudson Taylor. Un hermano cuenta que estaba con él cuando llegaron cartas con terribles noticias de todos los lugares de China donde había misioneros que él mismo había encomendado. Se estaban levantando graves motines y los extranjeros estaban siendo asesinados. Al leer las cartas,Hudson son emitió comentario, solamente comenzó a silbar la melodía de un conocido himno "Cristo siempre en Tí descanso". Cuando le pregunto como podía silbar en medio de tal situación cuando tantos compañeros estaban en peligro, respondió "Acongojarse no sería de ayuda para ellos y me incapacitaría a mí para mi trabajo, no puedo más que echar la carga sobre el Señor". Ese era su secreto y el poderde su fuerza, gozarse en su Señor y limitarse a echar la carga sobre Sus benditas espaldas. Todo lo que no agitaba al Salvador, ni perturbaba su Espíritu, tampoco lo agitaba a él. Su gozo parte de la verdadera comunión que tenía con Dios, el Dios a quién había conocido y del cual había experimentado los recursos que se encuentran en Él, sintiendo alegría y felicidad de depender de Él.
Como hijasde Dios disponemos de una fuerza interna verdadera que va mas allá de un estado anímico pasajero o un estado mental. Tenemos gozo y no hay circunstancia adversa o artimaña del enemigo que la pueda eliminar de nuestras vidas. Es como tener la ciudad del corazón amurallada, porque nos da fortaleza para estar firmes en el día malo. Es una gran riqueza pero hace falta estar en sintonía con el corazónde nuestro Padre Celestial para que nos transmita su gozo, ya que Él es la fuente. El apóstol Pablo experimento ese poder aún desde el fondo de una fría mazmorra, dejándonos sus hermosas enseñanzas "Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!" (Filip. 4:4). Lucas, el fiel compañero de Pablo fue testigo mejor que nadie de sus viajes y trabajos, sus tribulaciones y cautividades ypudo verlo regocijarse en su Señor. Estas experiencias con Pablo fueron de gran valor porque el Espíritu Santo se sirvió de él para escribir un evangelio. Su evangelio fue un el evangelio del gozo. Aún así los relatos tristes no faltan, multitudes de enfermos y lisiados, miserias morales y corporales se encuentran narrados de manera especial. Una mujer con flujo de sangre que había gastado todos susbienes en médicos sin ser curada por ninguno, un jóven lunático hijo único de un padre afligido, la hija de Jairo, su única hija, la viuda de Naín con su único hijo muerto, el esclavo enfermo del centurión y la gran multitud del pueblo y de mujeres que durante la crucifixión se golpeaban el pecho y lloraban, habiendo perdido toda esperanza. Solo Lucas muestra al Señor llorando sobre Jerusalén, ytambién describe con rasgos personales los efectos de la agonía sobre su cuerpo humano. ¡Parecería que solo hubiese penas y llantos aquí abajo!. ¡No!. Aquella magnífica declaración de los ángeles "He aquí os doy nuevas de gran gozo" (Lc. 2:10) llena todo el evangelio confiriéndole un carácter particular. ¡Tenemos un Salvador!. ¡Qué gracia y que gran tema de gozo!. Jesús Salva "perpetuamente a los...