Lorca y Alberti
ESTRUCTURA:
¡Qué emocionante la batalla absurda de aquellas personas que tuvieron la ingenuidad de
creer que un ejército de poetas sería capaz de frenar a uno de soldados; que lellamaban a
Madrid cosas como "centro del hombre", "brújula del mundo" y que eran capaces de dar hasta
su propia vida por salvar de la muerte una ciudad en la que no sólo veían un sinónimo de larazón y la libert ad, sino también un eje mplo de toda la belleza asediada de este desdichado
planeta! Eso había ocurrido hace setenta años en el Madrid cercado de la Guerra Civil y
ahora pasaba otravez en la antología preparada por Jesús García Sánchez, Capital de la
gloria (Poemas de la defensa de Madrid), y que junta en casi mil páginas ciento treint a y seis
poetas y miles de versos con losque los resistentes intentaban montar un escudo cont ra el
fascismo.
Ahí estaban algunos de los poemas que habí an hecho Antonio Machado, Raf ael Alberti,
Luis Cernuda, Rosa Chacel o JoséBergamín sobre la ciudad sitiada, y otros de autores
extranjeros que llegaron desde todos los rincones de la Tierra para formar parte de su
muralla, celebridades como Paul Êluard, César Vallejo, W. H.Auden, Octavio Paz, Nazim
Hikmet, Louis Aragon, Bertolt Brecht, Vladimir Holan, Pablo Neruda, Trist an Tzara o Vicente
Huidobro; pero también otros muchos de escritores desconocidos o de circunstanciasque, en
aquel momento propicio a la heroicidad y la exaltación románt ic a, llegaron a estar seguros de
que las palabras eran, de algún modo, un antídoto contra las balas. No lo fueron entonces,naturalmente, pero sí son hoy un refugio contra el olv ido, y una muestra de lo que los
habitant es de una ciudad pueden sentir por ell a cuando la ven amenazada.
(Adaptado dehttp://elpais.com/diario/2006/06/01/madrid/1149161064_850215.html)
El mar. La mar.
El mar. ¡Sólo la mar!
¿Por qué me trajiste, padre,
a la ciudad?
¿Por qué me desenterraste
del mar?
En sueños la marejada...
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