los anormales
Foucault dio clases en el Collège deFrance desde 1971 hasta su muerte en el 84. Las transcripciones de sus cursos se recogen en una colección de Akal, uno de cuyos volúmenes es el libro del que os hablo hoy, correspondiente al curso74/75. Antes de decir nada sobre su contenido, hay que aclarar que Foucault se beneficia póstumamente de un adelanto técnico de los 70: la cassette. Gracias a que existen muchos registros sonoros de susmultitudinarias clases, la transcripción no deja lugar a dudas. No le pasaba lo mismo a Hegel, por ejemplo, algunas de cuyas lecciones cambian, y mucho, según el autor de las notas que se sigan.El curso en cuestión se centró en la categoría del "anormal", que se sitúa en el quicio entre el Derecho penal y la psiquiatría. Foucault prosigue sus investigaciones en torno a las relaciones entresaber y poder, ocupándose, no tanto de la historia de las instituciones de reclusión (como en Vigilar y castigar), sino siguiendo la evolución de la psiquiatría forense. Al comienzo trae ejemplos dealgunos informes periciales, escritos por psiquiatras, en los que se aprecia claramente la voluntad de criminalizar a la persona completa, y no al acto que cometió (como en teoría dicta el Código penal).A partir de ahí, Foucault se lanza a hacer una genealogía del "anormal", buceando principalmente en dos direcciones: el monstruo y el masturbador. Muestra el deslizamiento del monstruo clásico...
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